Los periodistas italianos Emiliano Fittipaldi y Gianluigi Nuzzi, autores de libros elaborados con documentos reservados de la Santa Sede, son investigados en el ámbito de las pesquisas por la filtración.

El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, informó hoy en un comunicado de la apertura de esta investigación y añadió que también están siendo investigadas otras personas que podrían haber colaborado en la filtración de documentos reservados.

"La gendarmería vaticana, en calidad de policía judicial, había señalado a la magistratura vaticana la actividad desarrollada por los dos periodistas Nuzzi y Fittipaldi, como posible participación en el delito de difusión de noticias y documentos reservados", previsto en la legislación vaticana, afirmó Lombardi.

"La magistratura ha encontrado elementos que evidencian la complicidad en el delito por parte de los dos periodistas, que por esta razón están siendo ahora investigados", prosiguió.

El portavoz vaticano agregó que también "están siendo investigadas algunas otras personas que podrían haber cooperado en la filtración de los documentos reservados en cuestión".

Los periodistas, Nuzzi y Fittipaldi, se hicieron eco de la investigación en mensajes enviados desde sus propios perfiles de la red social twitter.

El semanario "L''Espresso" informó de la investigación sobre ambos y publicó un comentario de Fittipaldi, periodista de la propia publicación, en el que aseguró que se trata de un contraataque del "poder" pero que asume el riesgo.

"Cuando el periodismo de investigación descubre escándalos y secretos que el poder, también el poder temporal del Vaticano, quiere mantener ocultos, ese poder se defiende, contraatacando", afirmó Fittipaldi.

Los dos libros basados en información reservada son "Via Crucis", escrito por quien desveló el escándalo "Vatileaks" en 2012, Nuzzi, y "Avarizia", de Fittipaldi.

Hoy mismo la Santa Sede sí reveló que investiga la filtración de un documento reservado de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA), organismo que sin embargo no está sometido a investigación, según un comunicado.

La Santa Sede indicó que en los últimos días han aparecido en agencias y en prensa artículos que se refieren a un documento del APSA que apuntaría a "fue instrumentalizada para una actividad financiera ilegal" y añade que esta información es "parcial e imprecisa".

Las dos investigaciones se unen a la que sigue aún abierta por la filtración de documentos reservados de carácter financiero, que condujo a la detención del sacerdote español Lucio Ángel Vallejo Balda y la italiana Francesca Chaouqui y que se relacionan con los libros publicados por Fittipaldi y Nuzzi.

Vallejo Balda está detenido en el Vaticano, mientras que la ex relaciones públicas italiana fue puesta en libertad y a disposición de la magistratura por colaborar con la Justicia.

Ambos están a la espera de que se terminen las investigaciones preliminares y se formulen los cargos en su contra.