El lema francés fue ayer reivindicación, solidaridad, luto y celebración. Una extraña mezcla en la que tuvo lugar el acto de entrega de la medalla de oro de Santa Cruz de Tenerife a la Alianza Francesa por su más de medio siglo difundiendo el idioma, pero sobre todo los valores que cimentan la sociedad francesa y que hoy son los de cualquier país democrático. Libertad, igualdad y fraternidad. Tres palabras tan vigentes hoy como cuando se acuñaron y que provocaron que la planificación del acto se alterara. Primero, un minuto de silencio, que fue roto por la banda de música tocando La Marsellesa, que fue interpretada por un tenor y cantada también por una parte del público asistente. Y a la que siguió un breve silencio cargado de emociones.

El atentado del pasado miércoles estuvo presente en la sala y tiñó de melancolía un acto que debía ser festivo. Ante un salón de Plenos que no estaba lleno, el alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, quiso mostrar su "solidaridad con el pueblo francés" y "la más enérgica condena". "Sentimos como propio el dolor de la comunidad francesa", dijo, para mandar después "un abrazo sincero a quienes sufren las consecuencias de esta infamia atroz". En este contexto dramático, el mandatario consideró que "los méritos de la Alianza Francesa cobran un mayor significado". El alcalde se refirió a "los principios humanistas", tales como "democracia frente a totalitarismo, libertad frente a dogmatismo".

José Manuel Bermúdez criticó a los que con la violencia "no pretenden remover gobiernos sino que buscan acabar con la esencia de una civilización cimentada en la igualdad, la libertad y la fraternidad".

De vuelta al motivo del acto, el alcalde recordó que la Alianza Francesa se crea en 1961 y que sembró la semilla de la francofilia. Bermúdez agradeció la labor de la Alianza "acrecentada por la fe en lo que hacen, en todo un ideario al servicio de la comunidad". Y recordó que los lazos entre Santa Cruz y Francia son tan estrechos que hacen que "este ayuntamiento sea el único que el 14 de julio celebra el Día de Francia en un acto solemne en este salón de plenos". "Los que creemos en la fuerza de la razón tenemos que reivindicar el legado humanista", concluyó.

Carlos Castro Brunetto, presidente de la Alianza Francesa, explicó que este reconocimiento "demuestra que nuestro trabajo es visible" y habló de la labor de "fomento de la lengua y la cultura francesa", así como de "transmitir los valores de igualdad, libertad y fraternidad. Nunca antes en tan grave peligro desde la segunda Guerra Mundial". El resto de su discurso, sin embargo, fue vitalista y generoso en agradecimientos. Un fragmento de la Francia más abierta en el corazón de Santa Cruz.

54 años de intensa labor de divulgación

El acuerdo plenario de concesión de honores a la Alianza Francesa subraya la "intensa labor desarrollada entre la sociedad santacrucera y tinerfeña, divulgando la lengua francesa con el fin de enriquecer a la sociedad canaria en un contexto que convierte a las Islas en un puente entre los países de la francofonía y Europa". El Ayuntamiento reconoce igualmente la participación activa de la Alianza en la vida cultural de la ciudad, con la organización de numerosos actos durante sus 54 años de historia.

De La Mutine a Sabino Berthelot

Castro Brunetto recordó ayer el legado en Santa Cruz de muchos insignes franceses, entre los que destacó a Sabino Berthelot, "el más brillante pensador del siglo XIX". También explicó que barrios como el de los Hoteles o la plaza Weyler "tienen un trazado francés". Recordó que todas las actividades de la Alianza Francesa son gratuitas y pidió un aplauso para dos insignes colaboradores de la misma. También recordó la labor de los profesores y agradeció a la asociación TuSantaCruz que promoviera esta distinción.