La chimpancé que protagonizó una fuga el pasado verano del zoológico Oasis Park, de La Lajita (Fuerteventura), que responde al nombre de Cheeta, ha encontrado un nuevo hogar en las instalaciones de la Fundación Mona, un centro de rehabilitación de primates con sede en Girona.

Cheeta, junto a otro simio macho, fue adquirida ilegalmente en los años ochenta para que se fotografiasen con ella los turistas que visitaban Canarias.

Según ha explicado hoy la directora de la Fundación Mona, Olga Feliu, las autoridades intervinieron a los animales, ya que está prohibida su posesión por estar en peligro de extinción, y los dejaron en depósito en La Lajita, donde esta chimpancé ha permanecido durante 28 años.

El pasado junio, Cheeta protagonizó una fuga de La Lajita junto a otros dos simios, que tuvieron que ser sacrificados después de que resultasen heridos los propietarios del zoológico y un trabajador.

Los responsables de la instalación, una vez que la chimpancé se había quedado sola, decidieron que la falta de actividad social suponía un perjuicio para el animal y buscaron centros de rescate y cuidado de simios en cautividad.

A su vez, la Fundación Mona se había ofrecido al tener conocimiento del problema y, hoy, ha culminado el traslado de Cheeta a Cataluña.

El viaje de la chimpancé arrancó ayer por la mañana, cuando se procedió a anestesiarla y, a las 09.00 horas, ya estaba en un avión de carga para el desplazamiento desde Fuerteventura a Madrid.

Durante la noche, Cheeta ha sido transportada por carretera desde Madrid hasta las instalaciones de la Fundación Mona, a donde ha llegado esta mañana.

Olga Feliu recuerda que es la primera vez que este simio sale de Canarias en 30 años y que, ahora, deberá adaptarse a las nuevas condiciones de vida que tendrá, incluidas temperaturas más bajas que en Fuerteventura.

Feliu explica que la fuga de Cheeta del zoológico le supuso recibir un impacto de bala de las fuerzas de seguridad y que todavía tiene el proyectil ubicado entre los dos pulmones, "aunque se ha enquistado y parece que no habrá peligro".

Por el momento, la chimpancé se encuentra en una jaula de adaptación para habituarse a la dieta y a sus nuevos cuidadores, aunque hasta Girona se ha desplazado el que tenía mejor relación con ella en Fuerteventura para acelerar todo este proceso.

Una vez Cheeta se integre a su nueva vida, los responsables de la Fundación Mona la presentarán al grupo de ejemplares de su especie que residen en estas instalaciones como paso previo a que salga al espacio exterior del que disponen los animales.

La chimpancé es propiedad del Estado, ya que se encontraba en depósito, pero el zoológico de Fuerteventura, que la considera parte de su familia, abonará una pensión voluntaria vitalicia para su manutención y cuidado clínico, a la vez que asumirá los costes del traslado.