El Clásico del fútbol español ofrece en su primera entrega, en el estadio Santiago Bernabéu, un duelo que marcará a Rafa Benítez en el banquillo blanco y el reencuentro de los dos mejores tridentes del mundo: Bale-Cristiano-Benzema contra Messi-Neymar-Suárez.

Las lesiones de Bale y Benzema por bando madridista y de Messi por el azulgrana, han privado a los dos grandes de disfrutar de referentes de sus plantillas buena parte de la temporada. Vuelven los mejores tridentes ofensivos del mundo justo a tiempo. Para engrandecer un Clásico convertido en el mayor espectáculo futbolístico del mundo en cada edición.

Mil doscientos agentes de la Policía Nacional -seis veces más que en otro partido de estas características-, 120 policías locales -42 más de lo habitual-, 1.195 efectivos de la seguridad privada del Real Madrid, 80 ochenta sanitarios del Samur y 60 de la Cruz Roja velarán por la seguridad de los 80.000 aficionados que acudirán al partido.

Se presenta en la "casa blanca" en el momento más delicado de Benítez desde que llegó al Real Madrid. Se espera su once y la mentalidad con la que el Real Madrid salga en el duelo ante su eterno rival. Benítez lo sabe y lanza un mensaje de fútbol ofensivo en rueda de prensa pero dentro maneja aspectos puramente deportivos y estadísticos. Las altas esferas del club y la afición se mueven en otros parámetros. Una nueva suplencia de James o la ausencia en punta de Benzema por la búsqueda de mayor equilibrio desatarían la crítica si el resultado no es favorable.

Sí estarán en el once titular Keylor Navas, recuperado de su sobrecarga muscular, y Sergio Ramos. Con Marcelo recuperado en el lateral izquierdo y un pulso en el derecho que puede caer del lado de Dani Carvajal, también con el alta médica, en detrimento de Danilo. El laberinto de Benítez se inicia en el centro del campo. Con Modric fijo hay dos plazas para cuatro jugadores: Casemiro, Kroos, Isco y James. El colombiano reapareció en Sevilla y dijo que estaba para hacerlo antes. Lo demostró con su nivel y jugando dos partidos completos con su selección. La pelota está en el tejado de Rafa.

Mientras, el Barcelona visita el Santiago Bernabéu dispuesto, con Messi o sin él, a asestar un golpe al Real Madrid que, aunque no sería ni mucho menos definitivo y distanciarse en seis puntos.

Sin el astro argentino, Neymar y Luis Suárez han podido explotar todo su talento y capacidad de liderazgo. Entre los dos han marcado 16 de los últimos 19 goles del Barça y ambos comandan la tabla de goleadores del campeonato con 11 y 9 tantos, respectivamente.

Messi ha entrenado bien, lo mismo que el croata Ivan Rakitic, que los últimos días se ha entrenado con normalidad tras superar una pequeña rotura en el sóleo de la pierna derecha que sufrió en el último partido de la Liga de Campeones ante el BATE Borisov. Con Messi y Rakitic recuperados, el técnico asturiano podría alinear a su once de gala.