El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento del Puerto de la Cruz, Juan Carlos Marrero (CC), anuncia que en los primeros meses de 2016 concluirán las obras para asegurar la calle Tegueste, en Punta Brava, y que es intención del gobierno local (PP-CC) encargar también el próximo año un estudio en profundidad de la situación de toda la costa acantilada del barrio, "de ermita a ermita". El año 2016 será clave para el futuro del litoral de este popular barrio portuense: podrá conocerse la situación real de las vías y casas de la primera línea y tomar las medidas necesarias para evitar que se repitan derrumbes como el de la calle Tegueste, en mayo de este año.

Marrero se muestra satisfecho por el avance de las obras en la vía que se derrumbó parcialmente hace seis meses. "La fase de emergencia ya ha terminado, la cueva se rellenó con hormigón, la zona está protegida con un muro y una pequeña escollera y ahora se está en la fase de instalación de los micropilotes para asegurar el terreno. Luego vendrá el bulonado y, para terminar, la instalación de los servicios dañados -alumbrado y tuberías-, la reconstrucción del muro y el asfaltado".

La calle Tegueste se cerrará, como ya se había anunciado, al paso de vehículos. Su anchura tras las obras será de entre 1,8 y 2 metros.

Los trabajos de la calle Tegueste deben concluir a finales de enero y Marrero espera que ese plazo se cumpla, "o que al menos no se retrase más allá del mes de febrero".

La actuación de emergencia en esta pequeña vía de Punta Brava dejará una factura de "unos 700.000 euros para una obra en un tramo de apenas 30 metros", subraya el edil. Solo el hormigonado de la cueva que causó el derrumbe costó más de 100.000 euros.

Pero la parte más importante del trabajo pendiente es la elaboración de un estudio, "de punta a punta", que debe determinar si hay más cuevas o zonas inestables a lo largo de la totalidad de las calles Tegueste y Pelinor. "Con ese estudio en la mano sabremos si hay que actuar de urgencia en alguna zona y tomar las medidas necesarias", señala Marrero.

El estudio que encargará el Ayuntamiento portuense permitirá conocer con exactitud cuántas cuevas hay en la costa, bajo el acantilado, y qué profundidad tienen. Así como conocer, de manera detallada, el efecto del mar en un acantilado urbanizado, pero que sigue un proceso natural de erosión.

Pese a la complejidad técnica de esta investigación, Marrero espera tener los resultados en el primer semestre del año. "Tenerlo antes de junio nos permitiría actuar en los meses de verano, si se detectara alguna situación que lo requiriera", apunta el concejal. Con los datos técnicos en la mano, llegará el momento de planificar acciones y buscar financiación.

las claves

Un tramo de la calle Tegueste se vino abajo en la madrugada del 13 de mayo y en la actualidad se ejecutan las obras que han asegurado la zona y que permitirán reabrir la vía, solo a los peatones, en el primer trimestre de 2016.

La inversión realizada solo en la calle Tegueste ronda ya los 700.000 euros.

El estudio en profundidad del acantilado de Punta Brava, que se elaborará en 2016, permitirá conocer en qué situación se encuentra la zona y tomar medidas.