ANPE CANARIAS pidió ayer al Gobierno de Canarias que los fondos del Impuesto General sobre el Tráfico de Empresas (IGTE) se destinen a infraestructuras educativas y Formación Profesional, dos áreas que, subraya, se ajustan a las directrices planteadas por el Ejecutivo, los empresarios y la mesa de concertación social, es decir, empleo y obra pública.

Cuando el presidente Fernando Clavijo anunció la condonación de esta histórica deuda insistió en que su objetivo era que estos fondos -193 millones en 2016- se destinaran a empleo e infraestructuras, con la intención de que la economía canaria se dinamizara. Sin embargo, este sindicato considera que si la Administración busca mejorar los datos de inserción laboral y, al mismo tiempo, engrasar el engranaje económico del Archipiélago, ha de hacerlo poniendo la educación como prioridad. Sin embargo, a la sobrecarga horaria del profesorado hay que sumar las enormes carencias materiales a las que se enfrentan los docentes de muchos ciclos de FP. Además, muchos centros se encuentran en un estado deplorable. "En este contexto de recortes continuados a la educación, destinar parte del IGTE al sistema educativo es una cuestión de justicia", denuncia.