El Gobierno de Bélgica y la eléctrica belga Electrabel han cerrado un acuerdo para la prolongación hasta 2025 de los reactores Doel 1 y 2, los más antiguos del país, con el argumento de que garantizará la seguridad de suministro, informó hoy el primer ministro, Charles Michel.

"El reto para el Gobierno es conciliar dos objetivos: garantizar la seguridad del suministro y la inversión en la transición energética", dijo Michel en una rueda de prensa.

También aseguró que la decisión responde a una estrategia más amplia sobre energía, medio ambiente y empleo y consideró que se trata de un acuerdo "equilibrado", informa La Libre Belgique.

El Consejo de ministros ya había aprobado en diciembre del año pasado la prolongación hasta 2025, pero esta decisión estaba condicionada a llegar a un acuerdo con Electrabel antes del 30 de noviembre de este año.

Si no se hubiera logrado este acuerdo, las centrales tendrían que haber sido cerradas el próximo 31 de marzo.

Electrabel pagará por la explotación de estos reactores 20 millones de euros al año hasta el 2025, es decir, un total de 200 millones para todo el periodo.

La ministra de Energía, Marie-Christine Marghem, informó hace menos de dos semanas del reinicio de otros dos reactores, Doel 3 y Tihange 2, que habían sido cerrados temporalmente debido a la incertidumbre sobre su seguridad por la presencia de grietas en los tanques de acero.

"Electrabel ha demostrado de manera convincente que las microburbujas de hidrógeno presentes en las paredes de los tanques no tuvieron un impacto inaceptable sobre la seguridad de los reactores", dijo entonces la Agencia Federal de Control Nuclear (FANC).

Greenpeace, WWF y otras organizaciones medioambientales han considerado "absurda" la gestión del Gobierno belga porque creen que supone una renuncia a la futura inversión en energías renovables y al ahorro de energía.