Como si quisiera hacerle un tímido guiño a La Lupe -"Puro teatro"-, pero poniendo todo su pensamiento en Chavela Vargas. Así, más o menos, se puede resumir "Chaveleando", el espectáculo que hoy, a las 21:00 horas, colocará a Esther Ovejero en el epicentro del Espacio Guimerá (EGM) de Santa Cruz de Tenerife. A su lado aparecerán los músicos Francis Hernández (piano) y Roberto Amor (percusión) para dar forma a un proyecto que nació en el ocaso de 2013. "En realidad lo empezamos a mover en 2014, pero tampoco se ha visto demasiado", precisa la cantante sobre la media docena de veces que se ha mostrado en directo este catálogo musical que nació con la idea de rendirle un tributo a la Gran Dama del Poncho Rojo (1919-2012).
Ovejero no oculta que entre las raíces de "Chaveleando" hay un propósito individual "por mostrar algo en español a la gente que normalmente no va a mis conciertos", añadiendo que en ese proceso de investigación se preocupó muchísimo por marcar unos criterios de calidad. "Cuando pensé este proyecto tenía muy claro que no quería hacer algo cutre", puntualiza Esther en el arranque de una conversación en la que afloran los conceptos artísticos que rodean a "Chaveleando". "Elegí a Chavela Vargas por su gran personalidad, por la tradición que hay en su música, por lo emblemática que fue su carrera...", enumera una artista que igualmente se ha desdoblado en el papel de Ricca. "Ese es otro registro distinto al de Chaveleando... Aquí voy directamente a sus canciones y las hago mías y de los músicos que me acompañan en el escenario", precisa de un montaje que no se ha cambiado demasiado en relación a lo que pudieron ver los espectadores en la primera puesta en escena -en el año 2014-, aunque sí experimentó una madurez buscada.
La cantante costarricense siempre fue una inspiración para Ovejero. "Su discografía es interminable, pero me decidí por unas canciones con las que me sintiera identificada por una historia que me ha podido ocurrir a mí", afirma la canaria sobre por qué se inclinó por los títulos de Chavela Vargas que interpretará hoy en el EGM. "Esta será una propuesta bastante teatralizada, como era ella, en la que se intercalarán comentarios entre canción y canción. Es un diseño que transmite belleza y una enorme intimidad", comenta Ovejero de la atmósfera que se crea en las puestas en escena de un proyecto inundado de títulos que han sido referentes inequívocos en la larga trayectoria musical de la intérprete nacida en la localidad de San Joaquín de Flores (Heredia / Costa Rica). "Bajo esa apariencia de sencillez que le hemos dado al concierto aparece el sello propio que le hemos dado yo, Francis y Roberto", explica sobre lo que se va a encontrar hoy el público.
Con un diseño de vestuario y estilismo de Berta Makowsky, la cantante canaria propone un viaje al universo de La Chamana a partir de once temas muy reconocidos. "Si lo piden, tengo algún bis preparado", avisa de un reencuentro con el público que siempre vive de una manera muy especial. "Sea Esther Ovejero o Ricca, eso cariño siempre me acompaña", añade una solista que en los últimos meses ha promocionado las canciones que se incluyen en "Gerunds" (Ricca) por distintos escenarios de Barcelona, Huesca, Jaén, Madrid o Zaragoza.
Ovejero dice no tener problemas para entrar en el género del bolero o las rancheras. "No es lo que más hago, pero sí que tengo una larga trayectoria en estos dos campos porque de pequeña me pedían que interpretara canciones con esos registros... Cualquier fiesta que se organizaba en casa era la excusa perfecta para que Esther acabara con un bolero", recuerda en el desenlace de una entrevista en la que no se atreve a dar el nombre de su favorita. "No hay una que esté por encima de las demás, pero sí que me siento muy cómoda con Las cosas simples o La llorona", avanza sin olvidar que "siempre es más sencillo buscar esa identificación con una letra que tuvo un gran significado en tu vida, y en esta selección todas se eligieron por un motivo concreto. Trato de estar cómoda con todas y que el público lo pase bien", dijo en torno al "esqueleto" de un concierto cuyas localidades se pueden adquirir al precio de 5 euros. Las entradas para asistir a "Chaveleando" están a la venta en la taquilla del teatro Guimerá en dos horarios. Por la mañana, de 11:00 a 13:00 horas, y en el turno de tarde, de 18:00 a 20:00 horas.
CONCIERTO
"Chaveleando"
"Amaneció otra vez".
"En un rincón del alma".
"Ojalá que te vaya bonito".
"Las simples cosas".
"Volver".
"Tu me acostumbraste".
"Piensa en mí".
"El último trago".
"Luz de luna".
"La Llorona".
"Se me olvidó".
Vea aquí la interpretación de "La llorona" que hacen Esther Ovejero, Roberto Amor y Francis Hernández.