El Instituto de Enfermedades Tropicales ya tiene autorización para realizar las técnicas de identificación molecular del virus del ébola tras firmar un convenio con el Ministerio de Sanidad. A partir de este, la Consejería y el Instituto establecerán un sistema de atención continuada que garantizará "la capacidad de respuesta de laboratorio ante casos sospechosos o confirmados de infección las 24 horas del día los 365 días del año".

Este permiso -que convierte al instituto canario en el único, además del Carlos III, con autoridad para llevar a cabo estas evaluaciones- es el resultado de un acuerdo a cuatro bandas firmado por la Consejería de Sanidad, el Instituto Carlos III, el Ministerio y el propio instituto. El convenio de colaboración evitará que las muestras tengan que enviarse obligatoriamente hasta Madrid para ser valoradas. "En estos casos el transporte es tremendamente complicado; por eso es tan importante que Canarias pueda hacerlo", explicó el director del Instituto de Enfermedades Tropicales, Basilio Valladares ayer, tras la publicación del marco de colaboración en el Boletín Oficial de Canarias (BOC).

El Instituto de Enfermedades Tropicales ya realizaba otro tipo de pruebas, pero no la del ébola, que era competencia exclusiva del Instituto Carlos III. Este organismo continuará coordinando el proceso. Es decir, Valladares y su equipo trasladarán su veredicto a este centro. Remitirán siempre, de forma inmediata, un alícuota de las muestras vivas originales de pacientes que padezcan la enfermedad o sean sospechosos de haberla contraído.

El convenio entrará en vigor en breve, desde que el Centro Nacional de Microbiología del Instituto de Salud Carlos III haya entregado un informe a todas las partes donde se especifique la formación impartida y las capacidades técnicas del Instituto de Enfermedades Tropicales.

La lejanía y la insularidad han sido claves en esta decisión. "Es un acuerdo muy lógico. Las exigencias de transporte son elevadísimas. No puede ir en un avión de pasajeros, por ejemplo", defiende Valladares.

Más medios para poder ayudar a países africanos

Aunque en el acuerdo no se especifique la dimensión internacional, esta autorización permitirá que Canarias pueda ayudar a países vecinos más expuestos al ébola, explica el director del instituto, Basilio Valladares, que insiste en que el Archipiélago, por su situación, tiene que ser referente en asuntos como este. La idea es que en el futuro más inmediato también se puedan analizar en las Islas otras fiebres hemorrágicas, como el marburgo o la lassa. El instituto ya desarrolla una labor reconocida en la lucha contra el dengue.

La capacidad técnica de las Islas para responder

España está libre de ébola desde diciembre de 2013. En estos momentos el virus afecta a Liberia, Sierra Leona y Guinea Conakry. Aunque hay una probabilidad muy baja, el virus puede introducirse en España por la repatriación de cooperantes infectados que participan en las actividades de respuesta y control de la epidemia en los países afectados. Igualmente, otro flujo de entrada puede ser la llegada de viajeros que hayan ido a esos países y hayan contraído la enfermedad. En este contexto, el Ministerio de Sanidad y las comunidades desarrollaron un protocolo de actuación y el Comité Especial para la Gestión del Ébola propuso tener un número reducido de hospitales para el tratamiento de los casos confirmados. Uno de esos centros fue el Complejo Hospitalario Nuestra Señora de la Candelaria. Además, Canarias dispone de un laboratorio de nivel de bioseguridad 3 situado en el Instituto de Enfermedades Tropicales. Con estos medios, y ante la dificultad para el transporte de muestras consideradas como mercancía peligrosa de categoría A, ha surgido este acuerdo pionero.