La petrolera anglo holandesa Royal Dutch Shell prevé suprimir alrededor de 2.800 puestos de trabajo en todo el mundo con motivo de la adquisición de la gasista británica BG Group, lo que equivale al 3% de la plantilla total combinada de las dos empresas.

Este recorte de empleo se sumaría al ajuste de 7.500 puestos de trabajo acometido previamente de forma global entre la plantilla de Shell y los contratistas de la compañía.

Shell prevé que el negocio de BG se integrará en sus actividades, por lo que se plantea la consolidación de oficinas donde resulte factible en determinadas localizaciones en todo el mundo.

"Con respecto a la racionalización de oficinas en Reino Unido, Shell, tras completar la transacción, llevará a cabo una revisión exhaustiva a lo largo de 2016", añadió la petrolera.

La multinacional anglo holandesa indicó que este nuevo recorte de empleo resulta necesario para alcanzar los beneficios esperados de la fusión, incluyendo sinergias por importe bruto de 3.500 millones de dólares (3.210 millones de euros).

Royal Dutch Shell alcanzó el paado mes de abril un acuerdo para adquirir por unos 47.000 millones de libras esterlinas (64.400 millones de euros) a su competidora británica BG Group.