Nada más importante y hermoso que la verdad (Agatha Christie)

"El turismo que tiene plenamente en cuenta las repercusiones actuales y futuras, económicas, sociales y medioambientales para satisfacer las necesidades de los visitantes, de la industria, del entorno y de las comunidades anfitrionas". Esta es la definición que la organización Mundial del Turismo, OMT, hace sobre el referido tema.

"Las directrices para el desarrollo sostenible del turismo y las prácticas de gestión sostenible se aplican a todas las formas de turismo en todos los tipos de destinos, incluidos el turismo de masas y los diversos segmentos turísticos. Los principios de sostenibilidad se refieren a los aspectos medioambientales, económicos y socioculturales del desarrollo turístico, habiéndose de establecer un equilibrio adecuado entre esas tres dimensiones para garantizar su sostenibilidad a largo plazo. Por lo tanto, el turismo sostenible debe respetar la autenticidad sociocultural de las comunidades anfitrionas, conservar sus activos culturales y arquitectónicos y sus valores tradicionales, y contribuir al entendimiento y la tolerancia intercultural".

No creemos que pueda estar más clara esta definición en lo que a desarrollo turístico sostenible se refiere.

Hasta aquí, todo parece estar perfecto en cuanto a los objetivos que se pretenden. Sin embargo, tenemos las más lamentables experiencias vividas, donde hemos visto cómo se maltrata todo este importante objetivo, sin la más mínima consideración al pasado histórico de los elementos que se hacen desaparecer, amparándose en cuestiones políticas que nada tienen que ver con la cultura de los pueblos. Es una constante en la cual participan incluso aquellos que son capaces de firmar pactos del más amplio espec-tro mundial, para la conservación y el cumplimiento de los objetivos del desarrollo turístico sostenible.

"El desarrollo sostenible del turismo exige la participación informada de todos los agentes relevantes, así como un liderazgo político firme para lograr una colaboración amplia y establecer un consenso. El logro de un turismo sostenible es un proceso continuo y requiere un seguimiento constante de sus incidencias, para introducir las medidas preventivas o correctivas que resulten necesarias". Parece indiscutible la necesidad de una formación académico-profesional adecuada en todos los agentes actores de ese liderazgo político que se señala, sin cuya formación difícilmente podrán cumplir eficientemente con su cometido, tal como estamos viendo persistentemente en todo el mundo.

Muy complicado y lleno de incertidumbre parece ser el destino en aquellos lugares donde sus rectores del poder constituido ni tan siquiera, han tenido la oportunidad de saber y entender lo que se pretende con eso del desarrollo turístico sostenible, por lo cual se les ve haciendo "impactantes" declaraciones públicas sobre el tema, sin tener ni la más remota idea de lo que se trata.

"El turismo es un motor de desarrollo, pero también de bienestar social y cuenta ya con un amplio número de empresas concienciadas en temas como la protección al medioambiente, la accesibilidad o la igualdad de género, que pueden ayudar a concienciar a otros a unirse a las prácticas sostenibles y a aumentar su competitividad a través de una política de responsabilidad social corporativa", ha declarado Taleb Rifai, secretario general de la OMT, relacionado con el Pacto Mundial España en el marco de los Objetivos del Desarrollo Sostenible, recientemente aprobados por las Naciones Unidas, dentro de la Agenda de Desarrollo 2030, destacando que las prácticas empresariales éticas y responsables, adquieren una dimensión estratégica para llegar a unos resultados apetecibles.

Una auténtica utopía si no se cuenta con un personal seriamente capacitado que conozca las dimensiones del programa, su importancia capital y los valores que reportará a la Humanidad el seguimiento eficaz de las directrices propuestas por los objetivos del desarrollo turístico sostenible.

A todo este escenario, la OMT viene aportando a través de todos sus años de vida -desde su antecesora la UIOOT- serios programas de capacitación, a los que hemos asistido en muchas oportunidades comprobando "in situ" cómo representantes políticos, empresariales y sociales hacían acto de presencia en los mismos, sin el menor interés en sus contenidos y solo pendientes de las dietas o las oportunidades personales que se les ofrecían, sin tener para nada en cuenta las enseñanzas que se les impartían.

Las oportunidades que la innovación abre para el turismo, así como la importancia de promover iniciativas en materia de sostenibilidad y ética, constituyen temáticas principales en las actividades que la Organización Mundial del Turismo (OMT) organiza en la FITUR próxima, donde, desgraciadamente veremos otras caras con las mismas intenciones de pasarlo bien, y no enterarse de nada.

Desarrollo turístico sostenible tenemos. ¿Qué será eso?, se preguntarán...

*Del grupo de expertos de la Organización Mundial del Turismo. UNWTO