Los partidos que dan paso a unas vacaciones y los que se juegan después de un descanso prolongado, como el que tendrá el Tenerife este lunes ante el Alcorcón en el Heliodoro, "son un poco especiales". Es lo que piensa uno de los integrantes de la plantilla blanquiazul, Aitor Sanz, que ayer ofreció una rueda de prensa tras recibir el premio Jugador 5 Estrellas del mes de noviembre, después de ser elegido por aficionados en las redes sociales.

"Son fechas diferentes", explicó el madrileño. "Está todo en la cabeza. Los futbolistas intentamos seguir la misma rutina, pero, al final, te resulta imposible. Quieras o no, los hábitos no son los mismos", dijo refiriéndose a la influencia de las fiestas navideñas. "Estos partidos son un poco distintos. Son más exigentes de lo normal en el plano mental. Para nosotros será una prueba de fuego", avisó.

En cuanto a la inusual fecha del encuentro con el Alcorcón, compartió su deseo de que los aficionados acudan al estadio el lunes. "A ver si no nos lastra mucho la asistencia de público. Esperamos sentirnos arropados en casa, que es donde tenemos que dar un poco más", comentó Aitor, quien confía en que el Tenerife mejore sus registros como local. "Fuera de casa estamos siguiendo una línea de resultados bastante positiva, pero dentro nos está costando un poco más. Ahí tenemos que dar un salto de calidad, sumar de tres en tres y seguir con la buena línea de trabajo que estamos teniendo".

Por último, a 2016 le pidió tener "más tranquilidad" que en 2015, año que fue "muy convulso" para el Tenerife. "A ver si podemos dar un salto de calidad y mirar más arriba", concluyó Aitor.