Comienza 2016 con la incertidumbre de qué va pasar desde el punto de vista político en España. ¿Habrá nuevas elecciones o serán capaces de alcanzar un acuerdo las formaciones que han logrado representación parlamentaria en las Cortes Generales? Sea cual sea el resultado final, lo cierto es que se inicia un año que la mayoría de los indicadores muestran como bueno, a pesar de que todavía existen muchas personas pasándolo muy mal. La mayoría de los presupuestos que se han ido aprobando a lo largo del último mes reflejan un considerable incremento en el capítulo de inversiones, lo que se traducirá en creación de empleo, objetivo primordial de todo gestor público en la actualidad. También se observa un notable despegue del consumo y prueba de ello son las expectativas que el comercio ha puesto en la presente campaña de Navidad, donde se habla de aumentos de las ventas superiores al diez por ciento con respecto a 2014, lo que deberá plasmarse en una mejoría de la situación económica de los canarios. No es cuestión de tirar las campanas al vuelo, pues los efectos de la crisis aún perduran en muchas familias, pero sí para confiar en que el año que ahora comienza sea verdaderamente el de la recuperación. Los responsables políticos deberán estar atentos a que estas mejoras lleguen a todos y, fundamentalmente, a esos sectores de la población que peor lo han pasado en este tiempo de crisis, en especial a aquellos que perdieron el empleo y no pudieron sustituirlo por otro, o a los que en ese periodo no han logrado un trabajo, pese a estar capacitados para ello. Sirva como ejemplo los más de cien parados contratados, durante seis meses, por el Ayuntamiento de Santa Cruz, a través de un plan del Servicio Canario de Empleo.

Importante será aprovechar las oportunidades que la propia actividad económica ofrece. En este sentido, no pueden pasar desapercibidas las conclusiones del foro celebrado recientemente en la Universidad de La Laguna por los sectores de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) y el turismo. Empresarios e investigadores coincidieron en la necesidad de estrechar el nexo entre ambos con el objetivo de convertir el Archipiélago en "generador y exportador" de tecnología turística. Por ahora, tanto uno como otro son "altamente competitivos y cada vez más estratégicos" en las Islas, pero van cada uno por su lado. Según el diagnóstico realizado por los expertos que participaron en el citado foro, el Archipiélago "dispone de capital humano e infraestructuras para producir soluciones tecnológicas adecuadas" a lo que demanda hoy en día la actividad turística, pero a esta última no parece importarle. Debería cambiar el rumbo. Por otro lado, felicitar a la ULL por haber dado el primer paso que ahora no debe caer en saco roto.

Con nueve años de retraso, pues la oferta pública de empleo corresponde a 2007, el próximo 31 de enero se llevará a cabo, por fin, el examen de Enfermería. Alrededor de 30.000 personas pretenden presentarse a esta prueba destinada a cubrir 1.234 plazas vacantes de esta categoría del Servicio Canario de Salud. Aunque algo tarde, llegó.