Nicolás Pérez Hernández nació el 22 de marzo de 1922. Es un hombre vinculado al servicio de los demás, activo y respetuoso, a través de su cargo como presidente de Cáritas, cuyo recinto estuvo situado en la carretera general Las Arenas, de La Vera. Participó activamente en diferentes iniciativas con la finalidad de lograr mejorar la situación social de muchos vecinos. Era una persona que destacaba por su carácter abierto y servicial, luchando durante muchos años por los vecinos y vecinas del núcleo de La Vera, siendo muy apreciado por todos aquellos que formaban parte del lugar. Sin lugar a dudas, Nicolás destacaba por ser un libro abierto, muy servicial, educado y de muy buen talante. Durante toda su vida ha vivido en la calle Nueva. Su casa es conocida por la Casa Amarilla, ubicada en el barrio de La Vera de este municipio del Puerto la Cruz. Era un hombre trabajador por su pueblo, siempre acompañado de buenos amigos, que también compartían su forma de pensar, así como de trabajar codo con codo para lograr sacar muchos temas adelante, permaneciendo siempre atento a todos aquellos asuntos que correspondían a los vecinos y vecinas.

Nuestro biografiado estuvo presente en el partido ATI, permaneciendo como concejal en la oposición desde 1987 a 1991. En esa época, 1987, ganó las elecciones el PSOE por mayoría absoluta, y también en las siguientes elecciones de 1991. Nuestro amigo Nicolás fue fundador de la asociación de vecinos de La Vera, que llevaba por nombre "Amigos del Valle", siendo registrada en el Gobierno Civil de la provincia de Santa Cruz de Tenerife, con el nº 750, el 25 de septiembre de 1979. Nicolás fue el primer presidente, y socio nº 1, permaneciendo durante muchos años al mando de sus funciones, donde antes se decía "Alcalde de barrio".

En la actualidad, el nombre, la figura y la obra de Nicolás Pérez Hernández continúan siendo recordados en La Vera del Puerto, así como en La Vera de la Villa, ya que en aquellos tiempos sólo había esa asociación de vecinos que llevaba por nombre "Amigos del Valle", la que se encargaba de trasmitir a los ayuntamientos las quejas de los habitantes de ambos núcleos. Era un hombre que estaba rodeado de su equipo de trabajo, por lo que contribuyó a través de diferentes proyectos a favor de los demás.

Con estas líneas solo quiero y deseo que se conozca la obra Nicolás Pérez Hernández, para que así sea conocida su obra social en La Vera, y fuera de la misma.