Gobernó con mayorías aplastantes Agüimes y su primer intento en el Cabildo grancanario supuso un hito para la izquierda nacionalista que dice representar y defender. Antonio Morales (Nueva Canarias) lleva poco en la presidencia insular gracias a un pacto progresista, pero ya ha sido criticado por un supuesto insularismo que, en el caso del IGTE y en cualquier otro asunto, él dice casi detestar. Al contrario, en lo que sigue achaca más bien a Fernando Clavijo esa posible vuelta a los años 80 que teme que se esté dando.

Preside ahora la Fecai, ¿hacia dónde debe ir esa Federación?

La Fecai debe ser un instrumento de defensa de los cabildos y ha de ser absolutamente independiente. Muchas veces, tuve una opinión muy negativa de su papel...

Como alcalde...

Sí; creo que la Fecai hacía dejación del municipalismo, y lo denuncié en muchísimas ocasiones, para ponerse al servicio del Gobierno. He sido muy crítico porque, por ejemplo, con el IGTE no se ha respetado el diálogo y el consenso necesario para afrontar los retos de esa institución.

¿No se siente o se ha sentido solo en ese debate sobre el IGTE?

No, entre otras cosas porque la asamblea de alcaldes de Tenerife decidió algo muy parecido a lo que yo defiendo, también la de Gran Canaria y la Fecam. Por lo tanto, no me siento solo, pues lo defiende el 80% del arco parlamentario, sindicatos y organizaciones empresariales. Y es que la triple paridad es un modelo caduco y genera enormes diferencias y desequilibrios a los canarios. No se puede obviar que 1,7 millones de habitantes, de Tenerife y Gran Canaria deben recibir el mismo trato que el resto. En los últimos años, hemos ido generando un instrumento de consenso entre todas las instituciones y, por ejemplo, la fórmula de reparto del REF contempla la población y el territorio como elemento de solidaridad, y creo que una fórmula así o parecida debe sostener la distribución de los fondos del IGTE.

Es un debate muy similar al de la reforma electoral: ¿podría servir de base o retroalimentarse?

Es necesaria una reforma electoral, pero no podemos mezclar los dos asuntos como han querido hacer. Esa distribución de los recursos no puede repetir un injusto sistema electoral. Si hablamos de nuevos modelos que generen más solidaridad entre Islas e instrumentos más democráticos, no podemos insistir en un reparto absolutamente desequilibrado.

¿Cree que, al final, sus tesis ganarán, persuadirán al Gobierno?

No son solo mis tesis. Se quiere hacer ver que el presidente y el Cabildo grancanario están solos, y es falso. Es la tesis de sindicatos, empresarios, el 80% del Parlamento, muchos municipios...

Pues se le ha presentado, por este motivo, como un rescatador y reavivador del pleito insular...

No, jamás en mi vida he entendido la acción política desde el insularismo. Eso produce un enorme daño a Canarias, su gente, la democracia, a un nacionalismo integrador... Estoy en contra del insularismo y creo que son otros los que lo están explotando para enfrentar y dividir a los canarios.

¿Se está volviendo a los años 80?

Tengo miedo a que sea así y que alguien pueda dar por perdida políticamente una de las islas y la pretenda aislar porque el ciudadano ha votado de forma distinta al resto. Eso no se puede castigar, pues es lo que han decidido los hombres y mujeres de Gran Canaria.

Él lo niega en redondo, pero ¿Clavijo representa a la ATI profunda y está en la raíz de esa vuelta atrás?

Desde luego. Es así. En la historia canaria, siempre hubo intentos de dividirnos y generar enfrentamientos. Es algo que ha surgido de las grandes burguesías, no del pueblo llano. Yo nunca lo defendí.

Lo curioso es que a usted se le achaca un neopleitismo...

En absoluto. Huyo de eso, pues no se puede construir Canarias si no es desde el equilibrio entre islas. Creo en Canarias y jamás usaré el pleitismo. No entiendo Canarias sin la unión de las Islas. No me vale un nacionalismo a costa de todo, pues no está por encima de los derechos sociales, laborales, el respeto al medio ambiente y el territorio...

En ese sentido, ¿qué le parece la nueva ley del territorio que pretende el Ejecutivo autónomo?

Hay que esperar para saber si eso que se supone que busca, generar más agilidad, se dará o es lo contrario y hay más retrasos al aprobar los planes. Además, habrá que consensuarlos con las organizaciones empresariales y la sociedad civil, pues se trata de un instrumento de futuro importante para estas islas y, por tanto, debe salir con el máximo consenso posible.

Aunque sea presidente insular, ¿teme que el debilitamiento de la Cotmac en favor de cabildos y consistorios ponga más en riesgo el equilibrio con el medio y se cometan los errores de los 80, 90...?

Espero que eso no sea así y que se introduzcan elementos correctores que lo impidan, pero no lo sé hasta que no conozca en profundidad el texto. Esa posibilidad existe, pero no lo sé y prefiero no alimentar ningún tipo de controversia o debate hasta que pueda estudiarlo. Lo que sí entiendo es que no se puede poner en marcha todo a la vez; debe haber etapas y consensuar, al tener afecciones importantes a los industriales turísticos ya instalados. Todo eso hay que mirarlo y trabajarlo con muchísima prudencia.

Llegados aquí, ¿ha cambiado algo la reivindicación de Gran Canaria sobre hoteles de 4 estrellas?

La situación no ha cambiado. Creo que, en Canarias, muchas veces se ha utilizado de manera perversa los instrumentos legales que nos hemos ido dotando. No se puede usar la ley para perjudicar a un territorio o un destino concreto. Y eso se ha hecho, es algo palpable: se ha usado políticamente la ley para perjudicar a Gran Canaria, que tiene un millón y pico menos de camas que Tenerife.

Por eso, ¿deben crecer más en número que en calidad o ambas?

No, no hablo de crecer para equipararnos a alguien, lo que digo es que todo lo que se haga desde ahora ha de salir del diálogo y consenso. Que haya crecimiento o no, que se crezca en unos grados y no en otros debe ser fruto de ese consenso y tiene que pronunciarse a Isla en su conjunto: los empresarios, sindicatos... La sociedad civil.

¿Qué balance hace de los 6 primeros meses del Gobierno regional en áreas claves, como la social, con el retraso de la tan esperada ley, o en el ámbito económico?

No entiendo, por ejemplo, cómo se puede dejar fuera del IGTE la posibilidad de realizar proyectos sociosanitarios, que son generadores de empleo. Si en este país se construyeran las infraestructuras necesarias para atender las demandas sociales, crearíamos un millón de empleos. Estamos muy por debajo de países europeos, como Dinamarca, que está en un 9%, y nosotros en apenas un 1,4% de empleos dedicados a esto. Hay que agilizar la atención a los que peor lo pasan, aunque también entiendo que es un Gobierno nuevo que debe trabajar el presupuesto. Además, sé que la vicepresidenta quiere activar cuanto antes políticas sociales de alcance para los sectores más desprotegidos.

Pero, ¿le ha defraudado algo sobre lo prometido y sus plazos o los retrasos son inevitables? ¿Qué nota le pondría al Gobierno?

No le daría un aprobado, pues ha habido enfrentamientos innecesarios, falta de diálogo, intentos de aislar a alguna institución...

¿Se siente ninguneado como presidente de Gran Canaria?

No, pero sí creo que, con el IGTE, se ha intentado marginar a mi isla y me parece absolutamente rechazable. Además, se hace por intereses que no deben primar al tomar decisiones y acciones de gobierno. Usar las instituciones como arma arrojadiza contra una organización o administración es reprobable.

En este sentido, ¿cómo ve la salud del pacto? ¿Tiene futuro, durará o es endeble y está a expensas del escenario estatal?

Creo, sin ninguna duda, que tiene bastante que ver con lo que suceda en el Estado. Siempre he dicho que, si hubiese ganado el PP, el pacto en Canarias se habría roto.

Bueno, el PP ha ganado, otra cosa es que no pueda formar gobierno...

Sí, claro, me refiero a si el PP conformaba gobierno. En ese caso, el pacto canario se rompe seguro. Por otra parte, el pacto ha mostrado ciertas debilidades, con enfrentamientos o ninguneos a la hora de tomar ciertas decisiones.

Entre los incumplimientos está Santa Cruz, el Puerto, Arico, ahora CC esgrime Arona: ¿si fuera del PSC, se sentiría machacado e incomprendido en esos casos?

Prefiero no ponerme en la piel de otro partido. El PSOE está gobernando con CC y asume esa forma de gobernar. A lo mejor yo preferiría unas formas distintas, pero prefiero guardarme mi opinión.

¿Qué vislumbra en el Estado: cree que cuajará ese posible pacto entre PSOE y Podemos, quizás con el PNV y otros apoyos? ¿Esto podría afectar también a Canarias con un acuerdo de izquierdas?

Estoy convencido de que el PP no va a poder gobernar, y así lo decidió la mayoría de ciudadanos. Ha habido un voto de castigo a políticas neoliberales que han llevado al país a profundas desigualdades, a la quiebra de derechos sociales y laborales, y de libertades públicas. Defiendo, y en eso coincido con las opciones que hay, que se forme un gobierno progresista, aunque es verdad que podría ser complicado al estar formado por muchos partidos, pero les pediría un ejercicio de responsabilidad, pues es lo que ha pedido la ciudadanía, que con su voto ha quebrado el bipartidismo. Los hombres y mujeres de este país se merecen un esfuerzo de la izquierda para atender esa demanda de cambio.

Pero, ¿es un simple deseo o sabe que las conversaciones están más avanzadas de lo que aparentan?

No tengo conocimiento, pero todos los pronunciamientos públicos (la entrevista fue el jueves, antes del ofrecimiento de Iglesias a Sánchez y de que Rajoy declinara, por ahora, aspirar a la investidura) tienen que ver con la posibilidad de un gobierno progresista y lo han ido reflejando los medios, al rebajarse las famosas líneas rojas iniciales. Eso lo creo muy positivo...

Tanto su cabildo como Las Palmas tienen gobiernos de izquierda con varios partidos: ¿cree ese modelo exportable al Estado o habría muchas presiones internas y externas, políticas y de grupos económicos, para torpedearlo? ¿Sería una legislatura corta?

Caben todas esas opciones, y también que un país ejerza su soberanía, que los partidos sean capaces de asumirlo y plantar cara y que podamos generar esperanza e ilusión en la ciudadanía sobre que es posible una democracia si condicionantes ni en manos de grandes poderes económicos, como ha sucedido. Creo que gran parte de esas esperanzas están depositadas en ese gobierno progresista.

En caso contrario y de haber elecciones, ¿eso beneficiaría a los extremos, al PP y Podemos, aunque hay encuestas que lo niegan?

Las últimas dicen que no se producirían cambios sustanciales.

¿Por eso apuesta por aprovechar y hacer ese pacto progresista?

Efectivamente, creo que esas últimas encuestas han forzado un cambio notable en los partidos.

De haber elecciones, ¿NC debe seguir con el PSOE o mirar a CC?

Hablar sobre cosas que no se van a dar no me parece bien...

O sea, está seguro de que no habrá urnas y sí gobierno sin el PP...

Estoy convencido de que habrá responsabilidad y un gobierno progresista. Si no fuera así, el PSOE y NC ya debatirían con sus militantes las posibilidades o no de un nuevo pacto. Pero no me gusta hablar de cosas sobre las que veo muy pocas opciones de que se den.

¿Le defraudó el resultado?

No, me pareció positivo. Los resultados del PSOE en las Islas fueron de los más positivos de las regiones y Canarias tiene una voz progresista y nacionalista con NC.

¿NC pasó ya del flirteo con CC?

Sin duda, no sé construir el nacionalismo ni Canarias con formaciones que ya tienen muy poco de nacionalistas, que provocan desequilibrios y enfrentan a las Islas. No creo que sea el nacionalismo que saque de la pobreza a las Islas, del paro, que dé una buena educación... No se ha construido Canarias en los últimos años en positivo.

Pues ellos dicen que los que han renunciado al nacionalismo son ustedes al unirse al PSOE...

En absoluto hemos renunciado al nacionalismo. Somos una organización nacionalista, progresista y que seguirá defendiendo a Canarias. Somos la única voz progresista y nacionalista canaria en el Parlamento estatal. Es la realidad. Dijimos que esta era una alianza coyuntural, para fijar las posiciones del nacionalismo progresista, intentar evitar que repitiera un gobierno conservador y creo que los resultados se han logrado.

Presencia unitaria en Fitur y grandes expectativas turísticas

A diferencia de lo que hizo el PP en el Cabildo de Gran Canaria, el actual gobierno insular ha preferido ir junto al resto de las Islas a las ferias turísticas más relevantes y no con puesto propio. Esto se reflejó la semana pasada en Fitur y, según recalca Morales, se mantendrá porque, de momento, "no he visto desequilibrios ni marginación ni aquí ni en Londres. Me conocen y saben que digo lo que pienso. Además, nos libera 300.000 euros para captar turismo peninsular". Un objetivo que ya ha dado resultados al cerrarse en Fitur diversos acuerdos para aumentar las conexiones con aeropuertos españoles (son 14 ahora) y la periodicidad de vuelos. "Pretendemos mejorar los resultados del turismo peninsular, que ya mejoraron en 2015. Queremos alcanzar los 500.000 peninsulares y, para eso, hemos aumentado las frecuencias, la conectividad con Cataluña, Andalucía y Madrid, nuevas líneas con Asturias y trabajamos otras con Aragón, aparte de lugares de Europa como Budapest, Amsterdam... Asimismo, el turismo LGTB sigue aumentando y hay compañías que nos hablan de un aumento del 40% en verano: es, sin duda, un gran momento para el turismo en Gran Canaria".