El director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz Roldán, ha señalado hoy a la telefonía móvil como el sistema de comunicación más vulnerable y más necesitado de mecanismos de protección para aumentar su seguridad en el futuro.

"Lo que esperamos es un incremento de los delitos, básicamente del robo de información, a través de estos sistemas, que están muchísimo menos protegidos que los dispositivos fijos", ha advertido el jefe de los servicios secretos durante su participación en unas jornadas sobre ciberseguridad en la Universidad de Alcalá de Henares.

A su juicio, los problemas de seguridad en las comunicaciones serán más complejos en los próximos años, aunque la solución, como en el pasado y en el presente, seguirá siendo la misma: una mayor preparación, en términos de protección informática, para hacer frente a la vulnerabilidad.

"Estamos en el mismo juego que siempre. Alguien quiere comunicarse, poner su vida en unos sistemas de comunicación, y alguien se ocupa de querer aquello que no debe saber, que no le está permitido pero que podría permitir un beneficio rápido, aunque eso significaría cometer un robo, un delito", ha agregado.

Como ejemplo, se ha referido a varios casos de multinacionales afectadas por el robo de información con la consecuencia de haber perdido su posición estratégica en un producto o la adjudicación de un concurso internacional.

La forma de no ser el blanco de ese tipo de delitos es dotar sistema de comunicación de una mayor protección, ha subrayado Sanz Roldán.

"Hay que investigar, desarrollar procedimientos, métodos, sistemas y software para evitar que entren. La ciberseguridad no es una batalla perdida", ha asegurado.

Con un menor presupuesto que las multinacionales, el CNI "nunca" ha visto comprometida su seguridad informática y en su sistema "nunca ha entrado un hacker", según ha aseverado el jefe de los servicios secretos.

"En el último año, son 18.000 o 19.000 los ataques recibidos, de los cuales 180 fueron muy difíciles y 20 críticos, pero ninguno de los ataques críticos tuvo éxito. Por lo tanto, es posible", ha añadido.

Junto a una mejor preparación en ciberseguridad, el director del CNI ha señalado la confianza, para delegar la protección de las comunicaciones, como otro de los antídotos contra la vulnerabilidad.

"Los expertos quieren conocer en detalle los sistemas de comunicación para averiguar cómo entran, y por el bien de todos, pero no para utilizar después esa información", ha señalado.

"En el CNI lo que buscamos es el ciudadano seguro; no el ciudadano que lo esté complementamente, porque eso es muy difícil, pero sí que el ciudadano se sienta seguro. Si se siente seguro, eso ya es suficiente para que pueda disfrutar de todos sus logros y de todo lo que se le ofrece alrededor con libertad", ha concluido.