El anuncio de la expulsión definitiva del PP del actual alcalde de La Victoria, José Fermín Correa, y la solicitud de que sea considerado un "no adscrito" fija todas las miradas en el único edil del PP en el municipio, Leo García, cuyo papel resulta decisivo para el futuro de Correa, el gobierno PP-PSOE y otras posibles alianzas o censuras. García considera que ahora "toca esperar a que la secretaria municipal y el interventor presenten sus informes" y, sobre todo, a que Fermín Correa "tome una decisión, que debe pensar en frío".

El presidente insular del PP, Manuel Domínguez, ya ha adelantado que pedirá a Leo García que "no gobierne con un tránsfuga". Si García sale del gobierno, Correa se convertiría en el alcalde no adscrito de un gobierno en minoría con seis miembros: él y los cinco ediles del PSOE. CC-PNC tiene seis concejales y Leo García (PP) tendría la llave de la mayoría absoluta.

PP y CC optan por la prudencia, pero solo hay una manera legal de obligar a Fermín Correa a dejar la Alcaldía: presentar una moción de censura. Los números dicen que CC necesita al menos a Leo García para desalojar a Correa, aunque también podría contar con el PSOE.

Se supone que en Canarias CC y PSOE tienen un acuerdo político que haría posible esa alianza, pero hoy por hoy es inviable que los socialistas se sumen a una moción de censura con los nacionalistas. La situación actual es fruto del imposible entendimiento entre la CC que lidera el exalcalde Haroldo Martín y el PSOE que lideraba el exalcalde Manuel Correa, defenestrado como candidato días antes de las últimas elecciones locales a raíz de una denuncia de los nacionalistas.

Todas las miradas están ahora en Leo García. PP, CC, PSOE y el no adscrito Fermín Correa saben que su futuro inmediato está en manos del joven concejal.

Leo García habló ayer con EL DÍA y, muy tranquilo, aseguró: "No sé lo que va a pasar, todo depende de lo que decida Fermín. Ahora es el momento de Fermín. Soy consciente de que todas las miradas están puestas en mí, pero lo primero es que él decida qué hacer".

El concejal del PP recalca que ya él no decide por sí mismo y que ahora depende de lo que plantee la gestora local del PP: "Yo no actúo en solitario".

De momento, García no desvela sus preferencias y deja abierta la resolución de esta crisis: "Parece que el gobierno depende ahora de mí, pero no se sabe lo que va a ocurrir: se podría reconducir el pacto con el PSOE, podría haber un pacto con CC, me podría marchar a la oposición o incluso dejar la política. A mí se me abrió un expediente en el PP y se archivó. Sigo formando parte del PP y Fermín ha sido expulsado, por eso tenemos papeles diferentes y no sé si podremos llegar a un acuerdo o no".

La interpretación que hagan el interventor y la secretaria municipal de la ley 7/2015 de municipios de Canarias es una de las claves para el futuro del actual alcalde victoriero. Si no se convoca un pleno extraordinario antes, su opinión se conocerá en el pleno ordinario del 11 de febrero.

Ni exclusiva ni parcial

El artículo 28 de la Ley 7/2015 de municipios de Canarias establece que tendrán la consideración de ediles no adscritos aquellos que sean expulsados de la formación política que presentó su candidatura. Ese artículo establece que "los miembros no adscritos tendrán los derechos políticos y económicos que individualmente les correspondan como ediles". Se garantiza que puedan participar "con plenitud de derechos en las comisiones informativas", pero no podrán tener "dedicación exclusiva ni parcial". No podrán cobrar un sueldo, pero sí recibir dietas de asistencia.