El Ayuntamiento de Granadilla propondrá al pleno de la corporación la oposición a la posible instalación de la planta de biomasa en el puerto de Granadilla.

El alcalde del municipio, Jaime González Cejas, trasladará esta petición a la Dirección General de Industria y Energía y a la Viceconsejería de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias.

González Cejas asegura en un comunicado que la construcción de esta planta que la comunidad autónoma ha otorgado la condición de inversión estratégica, no coincide con la filosofía del grupo de gobierno municipal en el concepto de energía renovable.

Añade que la apuesta energética del gobierno municipal pasa por explotar el potencial de la isla en las energías limpias.

Dice Cejas, quien apoyó en su día la construcción del puerto industrial, que el funcionamiento de este proyecto se basa en la implantación de un combustible fósil desde el exterior, al no contar la isla con biomasa apreciable para funcionar la misma a pleno rendimiento.

"Ese aprovisionamiento exterior de residuos de madera -señala el alcalde-, plantea el riesgo de abrir la puerta a nuevas plagas fitosanitarias que podrían sumarse a las ya existentes, y que han originado millonarios daños a nuestros agricultores".

El alcalde resalta el "anacronismo" de que el propio Gobierno autonómico haya considerado estratégico para Canarias una planta basada en la incineración de materiales para producir energía.

"Puesto que al no haber suficiente materia que sustente su funcionamiento, la energía producida no supondrá más independencia energética, sino que aumentará nuestro grado de dependencia del exterior, no aportando ningún valor añadido", insiste el edil.

Considera que estratégico es la aprobación de los parques eólicos y fotovoltaicos, previstos en el municipio, "y por los que esta administración local lleva décadas apostando".