El Pleno del Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane ha debatido la situación en la que se encuentra el mercado municipal de abasto, con cuatro de los puestos cerrados y otros con licencias caducadas desde hace siete años.

El debate se inició con una propuesta del Partido Socialista. La moción fue defendida por el concejal Mauricio Pérez, que expuso no solo la necesidad de mejorar el mercado sino la conveniencia de rehabilitar los exteriores para tratar de que la instalación recupere el poder de atracción que tuvo antaño. Apostó por incluirlo dentro de los planes de zonas comerciales abiertas, obviando que tales proyectos ya no cuentan en 2016 con financiación del Gobierno de Canarias.

El portavoz de Izquierda Unida Canaria, Felipe Ramos, estuvo de acuerdo con los argumentos expuestos por el edil del PSC, pero defendió que lo primero era regularizar la situación de algunos puestos, es decir, "sacarlos a concurso", tanto los que están cerrados como aquellos que se están gestionando con licencias caducadas. A propósito, subrayó que había que darles "la oportunidad a otras personas" de poder entrar en la recova llanense.

Coalición Canaria también es consciente de la necesidad de actuar en el mercado "para volver a darle vida", tal y como manifestó su portavoz, Pío Lorenzo, quien recordó que "entre 2006 y 2007" se hicieron algunas obras de reforma", aunque insuficientes "para sacarlo de su letargo". Y es que los puestos "han ido perdiendo clientes hasta el cierre de locales". Se mostró partidario de realizar mejoras, pero subrayó que también era preciso "potenciar las visitas de turistas". Lorenzo hizo por último hincapié en que en la revalorización del mercado era importante la colaboración de los propios comerciantes allí ubicados.

Desde el grupo de gobierno, el portavoz del Partido Popular, Mariano Hernández, recordó al edil del PSOE que su partido "gestionó el mercado durante los últimos cuatro años" y le explicó que "incorporar este espacio a la zona comercial abierta ya no es posible porque el Gobierno de Canarias las ha dejado sin financiación". Eso sí, se mostró de acuerdo en la necesidad de potenciar este recurso "para que tenga el empuje de antaño", aunque al igual que el portavoz de IUC afirmó que había que regularizar la situación de los puestos por la caducidad de las licencias.

Tras las primeras intervenciones, el defensor de la iniciativa dijo estar de acuerdo "con la necesidad de trabajar para la renovación de las licencias", aunque "en las condiciones que está el mercado es difícil que sea atractivo poder entrar". La alcaldesa, Noelia García, rectificó a Mauricio Pérez, aclarando que "no se trata de una renovación de licencias, se trata de un concurso en el que se podrá presentar cualquier persona en igualdad de condiciones. No habrá privilegios ni ventajas" para los que ahora ocupan los puestos con respecto a los que opten por primera vez a los mismos.

El edil del PSOE defendió que era lógico "favorecer a los que durante los últimos 20 o 30 años" han estado en el mercado para que puedan continuar con sus puestos, una reflexión que la alcaldesa rebatió: "No hay que dar falsas expectativas; eso iría en contra del principio de igualdad". La secretaria accidental, técnica del servicio de Contratación, tuvo que intervenir para dejar claro al Pleno que tenía que ser un procedimiento "en igualdad" para todos. "Otra cosa es que se pueda valorar, por ejemplo, el haber trabajado en una pescadería, pero no en la pescadería concreta del mercado sino en cualquiera. Da igual si la pescadería es en Tenerife", subrayó. Es decir, concurso abierto.

Pío Lorenzo pidió entonces que se elaborara "un informe técnico sobre el estado de la instalación", que a la postre servirá como base "para la elaboración de un proyecto de reforma". Todos los partidos sí estuvieron de acuerdo en una cosa: la recova necesita un empujón o se muere.