Actual campeona del Open de España, la corredora de Descenso Blanca Juliá es el primer fichaje femenino del equipo canario Vadebicis-Mondraker. Nacida en Brasil en 1993 pero afincada en Barcelona desde su infancia, esta joven ciclista asegura que aunque el ciclismo en general y el DH en particular es un deporte eminentemente masculino siempre se ha sentido "bien recibida" por los corredores, entre los que ha hecho muchos amigos; aunque puntualiza que "también hay de los que te miran mal por ser chica y practicar un deporte de chico".

Cualidades como la fácil concentración, la memorización rápida de los circuitos de descenso y la osadía necesaria para practicar esta modalidad ciclista hacen que Juliá, con tan solo 22 años, haya sido fichada por el equipo canario, con el que correrá esta temporada 2016 circuitos a escala nacional e internacional. Rosa Delicado, jefa del equipo, asegura estar "muy satisfecha" con este nuevo fichaje para 2016, ya que es una de las corredoras más rápidas del circuito.

Juliá cuenta con un palmarés brillante desde que comenzó a competir en 2012 tanto a escala nacional como en su comunidad autónoma de origen, Cataluña. Así, entre 2014 y 2015 ha cosechado numerosos éxitos como ostentar el título de campeona de la Copa Catalana en ambas ediciones (DVO Downhill Cup) u obtener la primera y segunda plaza, respectivamente, en el Campeonato de España que se celebra en Panticosa (Huesca) cada año.

Amiga de sus ya compañeros de equipo Édgar Carballo, Yeray Vargas y Alexander Borges, Juliá confiesa que empezó en el mundo del descenso gracias a que su hermano mayor ya practicaba esta modalidad y fue él mismo quien la introdujo. Pese a que al principio le dio algo de "respeto" por el tamaño y peso de las bicis, su tenacidad en los entrenamientos han hecho que de hace unos años hasta ahora haya conseguido estos excelentes resultados.

Un debate frecuente en el mundo del ciclismo en general y del descenso en particular es la cuantía de los premios que se les dan a los corredores y corredoras, ya que habitualmente "ellos" reciben cuantías superiores a "ellas".

La joven de 22 años opina que "no es del todo justo porque tanto chicas como chicos bajamos por el mismo circuito y, por lo tanto, no debería de haber diferencia de premios"; sin embargo puntualiza que, por otro lado vería "normal" que no hubiese la misma recompensa "si no se llega ni a llenar un podio, ya que somos pocas chicas las que competimos en España, y son escasas las carreras e las que sobrepasamos las diez corredoras".

Aunque es muy joven aún, la ciclista quiere acabar los estudios que está cursando de Fotografía e irse fuera de Barcelona a trabajar. Sabe que es complicado "vivir del ciclismo, muy pocos profesionales pueden hacerlo", aunque admite que en el futuro sí le gustaría dedicarse a un trabajo vinculado con este sector.