El 20 de abril de 2014, el Tenerife derrotó al Numancia en el Heliodoro Rodríguez López por 3-2 y se situó cuarto en la clasificación de Segunda División, empatado a 54 puntos con el Barcelona B y a cuatro unidades de la plaza de ascenso directo más cercana, en poder del Éibar en ese momento. Ese día, el equipo entrenado por Cervera enlazó tres victorias y tocó techo en una campaña que finalizó encadenando siete derrotas.

Desde entonces, el representativo no ha vuelto a firmar un "nueve de nueve", objetivo que podría alcanzar este domingo si es capaz de imponerse al Almería (Heliodoro, 16:00 horas). Para llegar a esta situación, antes tuvo que vencer al Llagostera (3-1) y, más recientemente, al Mirandés (1-2).

Será el tercer intento de Martí de guiar, con éxito, al Tenerife hacia el triunfo en tres jornadas seguidas. Lo tuvo en su mano nada más llegar al banquillo blanquiazul, cuando debutó con un 2-0 ante el Alavés y siguió con un 1-2 en el campo del Albacete. La racha se rompió en la visita del Córdoba al Heliodoro (1-1). Seis jornadas más tarde, la escuadra tinerfeña volvió a coger impulso superando a la Ponferradina (0-1) y al Bilbao Athletic (2-0) en un margen de ocho días. Pero no cayó la tercera victoria: de nuevo, un empate; esta vez con el Numancia y en casa.

Esta misma temporada, pero con Raúl Agné en el banquillo, el Tenerife también estuvo cerca de sumar nueve puntos de nueve posibles. La secuencia fue idéntica a las posteriores, de dos victorias, frente al Llagostera (0-2) y el Mirandés (3-0), y una igualada, con el Almería (2-2) a domicilio.

Curiosamente, el único acercamiento que tuvo el Tenerife a esa serie de tres fechas ganando que protagonizó en la campaña 13/14 siguió el mismo patrón que en la temporada en curso. Con Cervera al frente del plantel, el equipo venció al Barcelona B (2-0) en el Rodríguez López y conquistó La Romareda (2-3). Pero no fue capaz de repetir teniendo al Deportivo Alavés como rival (1-1).