Ese proceso de recuperación de los espacios públicos como lugares para el intercambio social encuentra en la gastronomía un delicioso y preciso aliado.

La comida callejera -"street food" en inglés- representa quizá una de las expresiones más dinámicas y modernas, pero sobre todo "democráticas", del hecho culinario y de ahí que esas furgonetas de factura retro, tuneadas y que acogen cocinas "móviles" -las llamadas "food truck"- supongan un atractivo que cautiva a las generaciones más jóvenes, a partir de un concepto sencillo y desenfadado, con factores como la movilidad y la rapidez, conduciéndose desde una oferta de producto de calidad, elaborado de forma artesanal, que se consume con las manos y se acomoda a cualquier tipo de bolsillo.

El pasado martes, en La Granja Verde de La Orotava, se presentaba en sociedad "The Truck", que así se ha bautizado al furgón gastrogourmet con el que arranca esta tendencia, una iniciativa que pone en marcha Ingapan Canarias y el reconocido chef Juan Carlos Clemente, con la colaboración y el apoyo inestimable de Insular Canaria de Bebidas (Incabe).

En presencia del consejero de Agricultura y Ganadería del Gobierno de Canarias, Narvay Quintero, además de Efraín Medina, consejero insular de Empleo y Desarrollo Económico, el delegado comercial de Ingapan Canarias, Iago Encinas, explicaba que "The Truck", equipada bajo las directrices de un profesional de la categoría y experiencia de Juan Carlos Clemente (cuenta con plancha, freidora, fuegos y horno), pone a rodar "soluciones de alta gastronomía" y desde el espacio de una furgoneta "mueve" toda una serie de propuestas gourmet capaces de "alimentar" cualquier rincón de la Isla, a partir de una filosofía de "deslocalización", que fusiona tradición y vanguardia con el producto local como materia prima.

En principio, explicó Iago Encinas, la "furgoneta" se estacionará como complemento y acompañante de eventos y jornadas gastronómicas (la primera parada del plan de ruta ya está fijada para el próximo 12 de marzo en el Mercadillo del Agricultor de La Guancha) y, más adelante, se piensa sacarle "billete" para que salga de viaje a saborear otras Islas.

Juan Carlos Clemente, por su parte, se mostraba esperanzado con esta "experiencia nueva", sobre la que dijo encierra cierta "novelería", muy apropiada al carácter isleño. En opinión del chef, el valor de la "movilidad" y la posibilidad que abre esta fórmula en cuanto a "deslocalizar, divulgar y promocionar el producto canario", ya representa algo diferente que bien vale la pena experimentar.

Y la propuesta gastronómica estuvo a la altura de las expectativas: una samosa (empanadilla) de calabaza, queso y aromáticas; un pan con albondiguillas de conejo al salmorejo, detalles de gofio y cebolla crujiente; un taco de cochino negro con batata asada y jugo de miel, y blinis de papas con carne mechada y aguacate, maridaje de vino blanco y cerveza.

Ezequiel Pérez, director general de Insular Canarias de Bebidas, subrayó "lo ilusionante " de un proyecto que señalaba ha pasado de ser "una moda para convertirse en realidad", concluyendo así: "la gastronomía va sobre ruedas".

Efraín Medina, consejero insular de Empleo y Desarrollo Económico, fue conciso y ponderó el proyecto de "The Truck" por lo que representa de "competitivo e innovador", mientras el responsable del área de Agricultura y Ganadería del Gobierno de Canarias, Narvay Quintero, destacó el "valor añadido" del producto gastronómico canario en relación con el renglón del turismo.

Lo cierto es que puestos ya en marcha queda camino por delante. Los "street food" y los "food truck" suenan a motores emprendedores y el tiempo dirá si estos modelos de negocio encuentran su plaza en el "parque" gastronómico. Acaso valga este arranque para impulsar un cambio legal que consiga flexibilizar la venta ambulante de comida en España.