La Abogacía española ha expresado su "absoluto rechazo" al preacuerdo de la Unión Europea con Turquía para expulsar a este último país a los refugiados e inmigrantes que lleguen a Grecia porque supone una "vulneración radical y manifiesta del derecho internacional y europeo".

Se trata, según subraya la Abogacía en un comunicado, de aplicar esta medida "indiscriminadamente a todos, sin diferenciar y procurar refugio a los potenciales solicitantes de asilo".

A su juicio, la Convención de Ginebra para los Refugiados, la Carta Social Europea, el Convenio Europeo de Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, los tratados de la UE y la Carta de Derechos Fundamentales, así como las constituciones de los estados miembros "se vendría abajo con una medida de esa naturaleza".

En este sentido, recuerda que las normativas citadas "obligan a una admisión ordenada, digna, estudiada y personalizada de cada solicitud de protección internacional como las que los seres humanos que están llamando a las puertas de la UE plantean".

Y considera que eso es "perfectamente posible" en una Europa de más de 500 millones de personas, "en la que la admisión de personas refugiadas, por importante que sea su número, no es sino una pequeña contribución a la propia identidad solidaria de la Unión".

La Abogacía recuerda que cualquier medida de expulsión colectiva está radicalmente prohibida" por el sistema internacional y europeo de derechos humanos, y advierte de que "no todo vale", porque "incluso las conveniencias políticas más acreditadas deben cumplir estricta y rigurosamente con la ley".