El ministro español del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, confirmó hoy que España ya ha propuesto a la Comisión Europea acoger de inmediato a unos 450 refugiados procedentes de Grecia, Italia y Turquía dentro de los programas de reubicación y reasentamiento comunitarios.

"Ya hemos comunicado a la Comisión Europea nuestra intención de proceder a un reasentamiento inmediato desde Turquía de más de 250 personas, en una primera fase", explicó el ministro a su llegada a la reunión con sus homólogos europeos en Bruselas.

A esa cantidad se sumarían otros 150 demandantes de asilo y otros 50 procedentes de Italia, precisó, con lo que el total sería de en torno a 450 personas.

Los traslados, para los que ya hay gestiones, según el ministro, se enmarcan dentro del programa comunitario para la reubicación de 160.000 demandantes de asilo, que tiene un carácter obligatorio y se refiere a refugiados ya en suelo comunitario, y del programa de reasentamiento de 22.000 refugiados, con el estatus ya reconocido por la ONU, que están en países no comunitarios.

España aceptó el año pasado recibir en dos años a alrededor de 9.300 solicitantes de asilo de los 160.000 que se había marcado la UE y a más de 1.400 refugiados del cupo de 22.000 situados en países no comunitarios como Turquía, Líbano o Jordania.

El Consejo de ministros ya aprobó el plan nacional de acogida de 854 refugiados para este año.

El ministro explicó que esta cantidad se considerará aparte de lo que impliquen los compromisos de reasentamiento que surjan ahora una vez que se cierre el acuerdo definitivo con Turquía, al que consideró "un aliado estratégico".

"Sin su colaboración no estamos en condiciones de actuar de forma eficaz contra las organizaciones criminales que trafican con seres humanos", añadió, al tiempo que confió en que el acuerdo final con Ankara será "absolutamente conforme con la legislación internacional y con los principios fundacionales de la UE".

Asimismo, dijo que lo que ahora hay que hacer es precisar, concretar y aclarar la aplicación de la declaración del pasado lunes de los líderes comunitarios con relación a Turquía.

Preguntado por si no le preocupa devolver estas personas a un país que no cumpla los requisitos de la Convención de Ginebra, el ministro se limitó a repetir que "Turquía es un aliado estratégico indispensable para hacer frente a esta situación" y ha recordado que mientras no se solucionen los conflictos en Siria, Libia, Irak y Afganistán no se resolverá el problema.