Se denomina "tercer tiempo" a una tradición del rugby con la que los contrincantes, una vez terminado el partido, se encuentran para compartir unas cervezas, bromear y hacer grupo como excusa para pasar un rato bueno ya olvidada la dureza de este deporte de contacto.
Algunos montañeros también mencionan al "tercer tiempo" como el momento indescriptible y reparador al finalizar la "pateada" y tomar unas birras y condumios ya dejados atrás no pocos kilómetros.
En clave gastronómica, quizá ese "third hall" tan tonificante sea el que más se asemeje al formato del "food-truck"; itinerancia que ofrece singularidad, personalidad, bocados ricos para coger con los dedos, cerveza helada y que lleva implítica una forma de vida.
Ya puestos a la descripción, es el momento perfecto para recordar, en palabras de Julio Bienert ("Julius"), que a finales de marzo se desarrollará en Asturias (Parque Isabel la Católica de Gijón) el Campeonato de España de "FoodTrucks". El chef televisivo formará parte del jurado en una Comunidad, como la del Principado, que ha experimentado una llamativa efervescencia de esta modalidad tan sugerente.
Bien podría competir, y a gran nivel, el tinerfeño The Truck (furgón gastro-gourmet), iniciativa desarrollada por Ingapan Canarias y el jefe de cocina Juan Carlos Clemente y que tiene el respaldo decidido de Insular Canaria de Bebidas (Heineken). El prototipo fue presentado días pasados en La Granja Verde, en La Orotava, y los invitados pudieron desconectar con el -disculpen la insistencia- "tercer tiempo gastronómico".
Visualicen. A pie de camión, caña en mano para dar cuenta de un cochino negro con batata asada y jugo de miel; blinis de papas con carne mechada y aguacate; samosas (empanaditas hindúes) de calabaza, queso y hierbas aromáticas, o unas gratificantes albondiguillas de conejo al salmorejo con detalles de gofio y cebolla crujiente.
El chef de espacio tan característico (a Clemente lo acompañaba el chef José Miguel Barrera) pronto se verá satisfecho observando las expresiones de los comensales. Óptima forma y acicate para dar a conocer los grandes recursos de la cocina canaria en lugares hasta ahora impensables.
El remolque, camioncillo, guagua escolar transformados y un largo rosario de diseños rodantes mostrarán en un rincón del pueblo o ciudad elegida por qué merece la pena probar tal o cual delicia. ¿Estilos? Desde el corte motero, al de "breakfast in America", concepto vermutería o de cocina "guiri" ensamblada a los gustos patrios.
Así que del primigenio propósito de que "si el cliente no va a la barra, la barra va al cliente" a los actuales nómadas, media el matiz de "vehicular", una cocina refinada en la que está presente la personalidad del que también suele coger el volante para ir de un lado a otro. El director general de Incabe, Ezequiel Pérez, considera que con The Truck "se implanta en la Isla una fórmula atractiva que ya es una realidad en la Península y aquí también será exitosa. Pondremos en valor lo que se hace en esta tierra haciendo que nuestra gastronomía vaya sobre ruedas".
Caravanas, remolques o furgonetas-bares han existido desde que la automoción es automoción; de la versión más primigenia a la de los llamativos diseños inspirados en el rabioso estilo ambulante estadounidense, la revolución culinaria al volante está más que en ciernes.
Una modalidad gastronómica aparentemente tan sencilla puede abarcar una variedad de oferta increíblemente amplia. Desde los gofres a sándwiches y similares, a todo el surtido vegetal y cortes mexicanos u orientales, junto a todas las interpretaciones de alta cocina reconvertidas en bocados callejeros y tapas excelentes.
Como transeúnte, se puede disfrutar a pie de calle en ciudades como Nueva York, México DF, Berlín o Bremen (Alemania), incluso en Italia, y recaló en España con toda fuerza. La imaginación y capacidad de emprendeduría es básica para echarse a las carreteras y defender -y vender- un estilo propio, por ejemplo, el de preparar unos simples huevos estrellados.
El director comercial de Ingapan, Iago Encinas, subraya que The Truck supondrá una oferta culinaria de calidad, elaborada directamente por Clemente o por algún profesional invitado bajo su supervisión, y que estará presente en señalados eventos en Canarias. "Promocionar los grandes productos que tenemos siempre es un placer", proclama el citado cocinero.
Uno de los aspectos a tener en cuenta es la limpieza de los habitáculos y menajes acorde con la normativa para menús casi siempre concebidos para coger con los dedos. Luego, la forma de reclamar la atención de posibles clientes recuerda, según el caso, a aquellos ambulantes que proclamaban, voz en grito, las bonanzas de especialidades que salen de espacios muy reducidos y a veces mejor equipados que las cocinas convencionales.