El consejero de Sanidad del Gobierno de Canarias, Jesús Morera, ha señalado este martes que un total de 144 inmigrantes se han acogido a la orden impulsada por la Consejería en diciembre por la que se restituye el derecho de atención sanitaria a los inmigrantes excluidos en el Real Decreto de 2012.

En comisión parlamentaria y en respuesta a una pregunta de Nueva Canarias (NC), ha comentado que hay otras 52 personas tramitando su solicitud, y no se ha mostrado sorprendido por que no haya una "avalancha" ya que la mayor parte de este segmento de la población son personas jóvenes que no utilizan demasiado los recursos sanitarios.

En su opinión, el Real Decreto excluía a los inmigrantes de forma "inhumana e irracional", y cara al futuro, cree que el decisión de Canarias no va a generar un problema económico porque el coste es "mínimo" y que se mantendrá este ritmo, ya que los inmigrantes empiezan a tramitar sus solicitudes en el momento en el que empiezan a necesitar la atención médica.

El consejero ha comentado que "no hay nadie desatendido" en las islas, y ha recordado que los requisitos para optar a esta atención médica son llevar empadronado como mínimo tres meses, disponer de escasos recursos económicos y no tener cobertura a través de la Seguridad Social.

El portavoz de NC, Román Rodríguez, ha comentado que la retirada de la atención sanitaria fue una decisión "muy injusta" y además "poco inteligente" para la comunidad local al "tener fuera del sistema" a colectivos con los que se convive.

Ha señalado que la respuesta de Canarias no fue la "más eficiente" y se "ha retrasado demasiado", y ha pedido a la Consejería que haga el esfuerzo de trasladar toda la información a las ONG y las asociaciones de los países afectados.