Macaco reventó el "corazón" de Los Llanos de Aridane. Más de 5.000 personas metidas en la plaza de España, y aledaños, para disfrutar de un ritmo diferente, imposible de encuadrar dentro de un único estilo.

No era regaae, tampoco sonaba con claridad a rumba, ni tan siquiera groove, fue, en realidad, una mezcla de estilos igual de trabajados que de atrayentes para celebrar el X Aniversario del Contigo al Mediodía, ese encuentro musical que el ayuntamiento lleva a la calle para que su gente disfrute. Y ayer fue uno de esos días grandes. Un concierto enorme.

Pero si su música es buena, la sensación que desprenden sobre el escenario el artista catalán y su gente es quizás incluso mejor. Es el "rollo" de humanidad, si se quiere también de bohemia, que se trasmite en cada melodía. Bueno, en cada sonido y también cuando el artista exigió un "Sahara Libre", en presencia de las familias que acogen a niños saharauis en la Isla.

Un Macaco para recordar.