El Tenerife puede conseguir esta tarde su mejor racha de partidos sin perder desde el retorno a la Segunda División A del fútbol español en 2013. En estos momentos, el equipo que dirige José Luis Martí acumula ocho jornadas sumando puntos. Han sido cuatro victorias (Llagostera, Mirandés, Leganés y Lugo) y cuatro empates (Almería, Zaragoza, Osasuna y Alavés) para un total de 16 puntos.

Hay que remontarse hasta la pasada temporada para encontrar algo similar. Sucedió tras la llegada de Raúl Agné al banquillo blanquiazul. Pese a que su andadura comenzó con una derrota en el Heliodoro ante el Girona, a continuación logró mantener al conjunto insular ocho semanas sin caer derrotado. Empató mucho (cinco ocasiones) y ganó menos (tres), pero ese tramo de competición le permitió salir de la quema de forma momentánea. Fueron momentos de euforia que llevaron a pensar en acercarse a la lucha por el "play-off", algo que nunca se produjo. Sobre todo porque luego estuvo seis partidos sin ganar.

Un año antes, Álvaro Cervera llegaba con la soga al cuello a Ponferrada. Allí sumó los tres puntos gracias a un gol de Ayoze Pérez e inició su racha más positiva al frente del Tenerife: cinco victorias y tres empates para acumular 18 de los 24 puntos en juego durante esas ocho jornadas. El Tenerife dio un salto en la clasificación de ocho puestos y pasó de estar cinco por debajo de la salvación a cinco por encima. Su escalada siguió, aunque ya de forma más gradual, hasta su hundimiento en las siete jornadas finales.

¿Dónde estará el techo del equipo de Martí? De momento, puede superar las dos rachas mencionadas si no cae derrotado esta tarde ante el Albacete. Y está a un partido de distancia del "play-off". De hecho, solo el Almería lleva el mismo tiempo sin perder que los blanquiazules. Eso sí, fruto de seis empates y dos triunfos que no le han permitido escapar de los cuatro últimos lugares de la tabla.

El siguiente horizonte para el Tenerife estaría ya en la espectacular trayectoria de la segunda vuelta de la campaña 08-09, la del último ascenso a Primera, en la que llegó a estar 17 jornadas consecutivas sin conocer la derrota. El triunfo ante el Girona (4-1) en la vigésima fecha liguera dio inicio a esta racha del cuadro que dirigía José Luis Oltra, que solo se vio truncada en la trigésima séptima jornada cuando cayó por tres a uno en la visita al Hércules de Alicante.