He leído hace unos días algo sobre lo que estoy totalmente de acuerdo. Dice así: "Lo único que se necesita para que triunfe el mal, es que los hombres de bien no hagan nada", algo que tristemente suele ocurrir hoy en día; y también, "hay un limite en que la tolerancia deja de ser virtud". Somos a veces demasiado tolerantes con algunos hechos y extremadamente intolerantes con otros similares, especialmente si se refieren al Gobierno del PP. Ambos tienen que ver con la confusa y difícil situación actual. Es un hecho que la corrupción y la falta de consideración al bien común nos dominan. ¡Es la falta de principios! En el mundo, y en nuestro caso en España, todo el que tiene poder y posibilidades está sometido a la tentación de la corrupción. Casos hay en todos los partidos políticos, instituciones y sindicatos. No los voy a enumerar, aunque podría citar muchos casos y de toda época. Quizás disminuyeran en la "denostada" dictadura por temor a las consecuencias. Los gobiernos del color que sean, para que haya inversiones y se promueva "teóricamente" trabajo, dan una serie de ventajas fiscales a las empresas, bancos, etc. que suelen tener importantes beneficios pagando menos que las personas individuales. Es el caso de la Reserva de Inversiones de Canarias (RIC), que le dio una serie de ventajas a las empresas para que invirtieran en Canarias y así mejorar la situación económica y crear empleo. ¡Una de las tasas más altas de España! Ha sido el mismo Gobierno canario quien ha autorizado que lo hagan en África, me parece bien que se trate de ayudar a esos países, aunque quizás el que empresas extranjeras hagan negocio explotando su naturaleza, precios y salarios bajos no sea la mejor solución, y donde la corrupción campa por sus respetos. Pero considero prioritario la mejora de los servicios esenciales y el paro en Canarias, donde la situación social no es particularmente satisfactoria.

Continuando con la corrupción, hoy tristemente de moda, explotada al máximo su difusión por los medios de comunicación, cuando de otros temas importantes ni se habla. Siendo naturalmente mala, en todos los sentidos, y digna de ser corregida adecuadamente por la justicia, digo adecuadamente, porque muchas veces no se observa la rapidez necesaria, teniendo en muchos casos mucha mayor resonancia y espectáculo. Pues bien, para mi, no es lo mismo el que se beneficia personalmente, que el que realiza estos actos en beneficio del propio partido: propaganda en elecciones, construcción o mejora de sedes, etc. Desde luego todos los casos deben ser juzgados y recibir la corrección correspondiente, ¡pero todos, no unos mas que otros! Partidos como Ciudadanos se rasgan las vestiduras con el alcalde de Granada, del PP, y cogobiernan tranquilamente en Andalucía sin decir ni pío. Me viene ahora a cuento algo que leí el año pasado: "Corresponde a la izquierda (estoy por escuchar un mea culpa de algún partido o gobierno de izquierdas por algo mal hecho, y haberlos haylos) demostrar que sus invocaciones a la igualdad rebasan el carácter de retóricas, que se desvanecen ante los intereses partidistas". Abundando en lo mismo, Pablo Iglesias Posse, socialista de pro, creo que fundador de UGT y del periódico El socialista, en 1910, cuando obtuvo el acta de diputado y en su presentación en el Parlamento, dijo algo así como "nosotros obedecemos las leyes siempre que nos convengan". Digo esto porque cuando habla la izquierda parece que la razón esta siempre de su lado, existiendo una "superioridad moral con otros partidos". Conociendo algo la historia de la humanidad, en estos dos últimos siglos ¿creen que esta justificada esta apreciación? Últimamente, desde que el para mi nefasto Zapatero promulgo la Ley de la Memoria Histórica, que aparte de corregir alguna injusticia, está cometiendo otras y haciendo renacer la animosidad entre españoles, solo se está aplicando para un bando, y además incorrectamente, pues solo cuando signifique un enaltecimiento de la dictadura debería aplicarse, y se está manejando de forma abusiva y generalista. Rusia cuna del socialismo mas radical, el marxismo-leninismo, no gobierna, pero conserva todos los palacios de los zares, sus monumentos, e incluso gran numero de sus costumbres. Recordando mi apoliticismo, nos olvidamos de lo nefastas que fueron las dos Repúblicas para España, la primera acabó en un gobierno cantonalista, unas ciudades contra otras, Murcia contra Cartagena, Sevilla, Cádiz, Castellón... La Segunda con sus checas y atrocidades sin cuento terminó inevitablemente en una guerra civil entre hermanos. Hoy en día, por el hecho de ser republicano, ya se tiene derecho a un homenaje, y como hayas nacido y servido en la época de Franco, aunque hayas hecho mucho bien, serás denostado.