Decía el pasado enero el alcalde de El Rosario, Escolástico Gil, que la plantación de papas del agricultor realejero Miguel Ángel García en Montaña Birmagen, en Las Lagunetas, podría tener un efecto incluso paisajístico, al tiempo que ponía de relieve que era la mayor que en los últimos años se había realizado en el municipio. Entonces, las papas estaban a medio plantar y el suelo era de color marrón tierra. Tres meses después, los tonos de la zona han cambiado radicalmente.

La superficie cultivada es de 180.000 metros cuadrados y a ella fueron destinados 1.400 sacos de papas de semilla y una inversión de 80.000 euros (unos 10.000 solo para guano). Y no hay ningún cero de más en los datos anteriores; pese a lo sorprendente, son esos. Su responsable, como ya publicó en su día este periódico, es un profesional norteño que desde los 20 años empezó a cultivar pequeños terrenos. Algo más de dos décadas después juega en una liga distinta: la de las grandes plantaciones, capaces hasta de alterar un poco el color de un lugar como Las Lagunetas, que ha pasado de su verde de siempre a un tono más "verde papa".