Tras un 2014 en el que dejó la iniciativa de la obra pública en manos del Estado y las administraciones locales, el Gobierno de Canarias reactivó el año pasado las licitaciones hasta multiplicar casi por cuatro los importes de los concursos para la ejecución de infraestructuras y edificaciones.

Las cifras de la patronal de las grandes constructoras del país (Seopan) correspondientes a 2015 -aún provisionales- atribuyen al Ejecutivo canario un total de 152,5 millones de euros frente a los apenas 41 millones del ejercicio anterior. El comportamiento del Gobierno autonómico contrasta con el desplome experimentado por el gasto en esta materia de las instituciones locales, que pasaron de 268,4 a 179,3 millones en el mismo periodo, aunque siguen siendo las administraciones que llevan el peso de la obra pública.

La licitación pública en el Archipiélago ascendió en 2015 a 437,2 millones de euros, un 5,5% más que en los doce meses precedentes. La pujanza del Ejecutivo es el factor que explica este incremento, puesto que el montante que destinó a estos concursos fue superior en un 271% al de 2014, frente al descenso de las corporaciones locales -un 33% menos- y la estabilización de la Administración central, que licitó proyectos por 105,4 millones, unos 500.000 euros más que el año anterior.

La inversión total fue superior en la provincia de Las Palmas: 264,5 millones, frente a los 172,6 de Santa Cruz de Tenerife. Esta diferencia es fruto de la mayor cuantía de las licitaciones de las administraciones autonómica y central en las islas orientales, mientras que las corporaciones locales de la provincia occidental sobrepasaron en este aspecto a las de Las Palmas.

La explosión inversora del Gobierno de Canarias se concentró en los meses de abril y mayo -en vísperas de las elecciones autonómicas y municipales-, cuando convocó concursos por valor de 103,4 y 21,8 millones de euros, respectivamente.

El ascenso del 271% en las licitaciones públicas de la Administración regional canaria solo fue superado por el impulsado por el Gobierno de Navarra, que se cifró en el 292%. A considerable distancia queda Aragón, que sacó a concurso un 75% más en obra pública. En el extremo contrario se encuentran los descensos superiores al 50% de Andalucía y Asturias.

Si se observan las cifras absolutas de cantidades licitadas -y no su evolución respecto a 2014-, cinco comunidades se sitúan por encima de Canarias en este aspecto: Cataluña, con 444,5 millones; Madrid, con 376,7; País Vasco, con 303,2; Andalucía, con 202,9; y Galicia, con 185.

El incremento en las licitaciones del Gobierno canario durante 2015 no fue suficiente para colocar a las Islas entre las regiones en que más se incrementó este registro. Cuando se suman las cantidades sacadas a concurso por todas las administraciones -central, autonómica y local-, se comprueba que cinco comunidades -además de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla- superan a Canarias, en la que creció un 5,5%: Navarra casi dobló la inversión (98%), Aragón, Baleares y Castilla y León se situaron en el entorno del 35% y Galicia se acercó al 24%. Por el contrario, Extremadura presenta una disminución del 60% y Andalucía, Cantabria y Murcia rondan el 40% de caída.

las cifras

437 millones. Es la cuantía licitada en el Archipiélago por todas las administraciones -central, autonómica y locales- durante ese periodo.

152 millones. Es la cantidad que sacó a concurso solo el Gobierno de Canarias en ese periodo. El año anterior había licitado apenas 41 millones.

179 millones. Es la cuantía a la que ascendió la licitación de las administraciones locales de las Islas en 2015, unos 90 millones menos.

105,4 millones. La licitación del Gobierno central se mantuvo casi sin cambios el año pasado.