Mal resultado para el Echeyde Tenerife en el partido de la promoción a División de Honor de Waterpolo que le enfrentó ayer al Rubí que entrena Antoni Aguilar. Los tinerfeños perdieron por tres goles de diferencia (12-15), siendo determinante en el desarrollo del juego la expulsión del jugador local Santiago San Martín. El Rubí evidenció su mayor veteranía en citas como esta y, como ya adelantó el entrenador tinerfeño, la ventaja de estar en la División de Honor le ayuda a aprovechar decisiones puntuales de los árbitros. Porque los de blanco fueron ayer claves en romper la línea ganadora que llevaba el Echeyde Tenerife, con ventajas de hasta tres goles en el marcador. Las decisiones de los colegiados acabaron con cinco locales sin poder concluir el encuentro. Alcalá y Fernández Caldas, ambos con cuatro, fueron los máximos anotadores del Echeyde, mientras que en el Rubí destacó Carrasco, con el mismo número de goles. Ahora, a esperar el milagro.