La aparición hace cinco años de nuevas terapias para el tratamiento del melanoma supuso un punto de inflexión que "cambió radicalmente el paradigma" de este tumor que, aunque cada vez es más frecuente y afecta a gente más joven, permite vislumbrar con optimismo el futuro de esta enfermedad.

Así lo aseguró Eva Muñoz, oncóloga del Hospital Universitario Vall d''Hebron de Barcelona, quien calificó de "muy sustancial" el cambio producido en los últimos cinco años gracias a la inmunoterapia y a las terapias dirigidas, que será aún "más significativo" con las nuevas investigaciones.

El melanoma, del que ayer se celebró el Día Mundial, puede afectar a cualquier persona, aunque rasgos físicos como piel blanca y ojos claros son un factor de riesgo, al igual que tener más de cien pecas o lunares.

En España se diagnostican 5.000 nuevos casos cada año y su incidencia sube un 7% anualmente. Es el octavo tumor más frecuente en su diagnóstico, pero se sitúa entre los dos últimos en mortalidad, ya que la mayoría de los casos no se encuentran en fase avanzada cuando son diagnosticados.

"Los que nos dedicamos a esto vemos el futuro con mucha esperanza", dijo Muñoz.