El Cabildo de Tenerife presentó esta semana a representantes de los ayuntamientos del área metropolitana las reivindicaciones de las mujeres del campo recogidas en el estudio "Así hablan ellas", una investigación realizada por el Servicio Técnico de Agricultura y Desarrollo Rural de la Corporación insular sobre las condiciones y la posición de las mujeres agricultoras y ganaderas de Tenerife.

El presidente del Cabildo, Carlos Alonso, destacó ayer que "queremos poner en común estas reivindicaciones para consensuar entre todos las estrategias necesarias que permitan dar visibilidad a las mujeres profesionales del sector primario".

Por su parte, el vicepresidente y consejero insular de Agricultura, Ganadería y Pesca, Jesús Morales, apuntó que el objetivo de esta investigación, cuyas conclusiones ya se han presentado a los consistorios del Norte y Sur de la Isla, es "incorporar la perspectiva de género y el principio de igualdad en el diseño de las políticas de desarrollo rural tanto a nivel insular como municipal en un sector en el que se calcula que hay un 30% de agricultoras y ganaderas".

"Así hablan ellas" se centra en la percepción que tienen las mujeres profesionales del sector primario de su propia realidad, es decir, de aspectos como su identidad, condiciones laborales, motivación para continuar en el sector y las dificultades a las que se enfrentan para poder conciliar la vida laboral y la familiar, entre otras cuestiones.

El estudio recomienda varias líneas de trabajo a seguir orientadas a potenciar la autoconciencia de las mujeres para que ocupen el espacio que les corresponde así como dotarlas de habilidades para que puedan desenvolverse bien en su medio.

También es necesario, según la investigación, favorecer su reconocimiento social mediante la creación de espacios en los que puedan intercambiar experiencias.

Según el estudio, las mujeres agricultoras y ganaderas tienen en común la sensación de que "existen muchas más mujeres en el sector de las que ellas mismas saben, pero que están muy poco visibles", asimismo, la mayoría se sienten "muy orgullosas y satisfechas" de trabajar en el campo, a pesar de las dificultades intrínsecas del sector que son "muy duras".

Otra de las conclusiones es que la mayoría coinciden en que su poca presencia en las tareas de representación ante entidades profesionales, proveedores e instituciones se debe "a la suma de obstáculos sexistas y la falta de propio tiempo para asumirlo".