Perros adiestrados recordarán la importancia de recoger los excrementos de las mascotas en Arona tras una campaña de información y sensibilización para mantener el municipio limpio.

Así lo ha informado hoy la concejal de Medio Ambiente, Yurena García Álvarez, quien afirma que es importante conseguir que la ciudadanía entienda que los espacios comunes "son de todos" y que "esto no tiene que ver con turistas o visitantes, sino con nuestra propia convivencia".

El diez por ciento de comunicaciones al Servicio de Atención a la Ciudadanía (SAC) son relativas a la limpieza de excrementos de animales en las calles.

Bajo el nombre "Arona, te Cuidamos tod@s," la iniciativa supone tres meses de acciones en todos los barrios y con colectivos y asociaciones y se centra en los residuos sólidos urbanos, los excrementos de mascotas y las colillas.

Se contempla exhibiciones de estos perros adiestrados, senderos con mascotas, visitas al PIRS, conferencias, actividades de carácter medioambiental y reuniones para informar de la normativa de limpieza y generar debates que lleven a mejorar el sistema de recogida y el saneamiento.

La necesidad de una campaña de concienciación queda de manifiesto cuando se observan los estudios previos realizados por el Área de Medio Ambiente sobre la situación de limpieza en Arona.

Los datos revelan que el 30 por ciento de las basuras se abandonan por fuera de los contenedores de recogida aún cuando estos están vacíos.

A todo eso hay que sumar el abandono de enseres junto a papeleras, realidades que acaban repercutiendo en todo el servicio de recogida de basuras y limpieza.

Las ordenanzas para Fomentar y Garantizar la Convivencia, de Limpieza Pública y de Protección y Tenencia de Animales de Compañía y Animales Potencialmente Peligrosos contemplan sanciones.

Estas multas van desde 30 a más de 15.000 euros por arrojar basuras fuera de los contenedores y papeleras o no retirar las deposiciones de las mascotas.

Estas normas regulan los procedimientos de protección de la salud pública y la salubridad, el respeto al medio ambiente o el derecho a disfrutar de un espacio público limpio y no degradado.

A principios del mes de mayo, comenzó una primera fase de diagnóstico, con encuestas a pie de calle para recoger información y sugerencias de la población.