En el marco de la campaña iniciada por diversos colectivos para reivindicar el desmantelamiento de la central eléctrica de Las Caletillas y por favorecer la implantación y el uso generalizado de las energías renovables en la Isla, ayer se concentraron en la plaza de la Basílica (Candelaria) en torno a un centenar de personas.

Con lemas como "no subestación, no + tendidos", "no central de Las Caletillas, desmantelamiento ¡ya!" y "sí renovables, no a la central térmica de Caletillas", este acto fue convocado por la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético para Canarias, la Plataforma Candelaria contra la Central y la Asamblea Ciudadana contra el Gas. Entre los asistentes se encontraban varios miembros del gobierno municipal de la Villa Mariana, así como de Sí se Puede, Izquierda Unida, Podemos, PSOE y Coalición Canaria.

En este contexto, a la plaza de la Basílica de Candelaria ayer retornó "el espíritu de Vilaflor" como un elemento al que aludió la organización para incentivar la participación y despertar la conciencia ciudadana hacia la lucha por el uso de las energías renovables "y contra estos gobiernos cómplices", señalando a las condiciones naturales de la Isla como otro factor a favor de sus planteamientos.

El "respeto" al PIOT y al Plan General de Ordenación (PGO) de Candelaria, que contiene la eliminación de la central térmica de Las Caletillas en un plazo que ya expiró (julio de 2015), formó parte del contenido del manifiesto leído por Antonio Cabrera, portavoz de la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético para Canarias, y Cristina Díaz Rodríguez, homóloga de la Plataforma Candelaria contra la Central.

La instalación del ciclo combinado en dicho recinto supondría asegurar la continuidad de la central térmica. Eso, junto a la regasificadora, el gasoducto y los nuevos tendidos "es lo que necesita el monopolio para prorrogar su negocio y el control del sistema eléctrico insular".