El colegio Pureza de María de La Cuesta, como muchos otros, tiene entre sus prioridades un espacio para las actividades solidarias. En este caso, hace unos días celebró su Carrera Solidaria, en donde más de 500 alumnos, y parte de la comunidad educativa del centro, participaron con el único fin de conseguir dar a los que menos tienen, teniendo como eje central las misiones que la congregación tiene distribuidas por el continente africano. Con la adquisición de un dorsal por un mínimo coste, profesores, religiosas, padres y madres, junto a sus hijos participaron en la segunda edición de la carrera en un circuito habilitado por el área de Seguridad Ciudadana lagunera en el entorno de la calle Buitrago, sede del centro educativo. Después del "esfuerzo", al margen de las risas y el deber cumplido, tocó reponer fuerzas con el avituallamiento preparado por las empresas colaboradoras.