La primera impresión que transmiten los técnicos y las autoridades es que todo salió mejor de lo previsto. Ayer comenzó la demolición del edificio Julián José, de Los Cristianos, alcanzando el nivel señalado por la empresa encargada de realizar el peritaje correspondiente al estudio encargado por el Ayuntamiento de Arona para determinar las causas del colapso del inmueble, que tuvo lugar el 14 de abril pasado.

Para hoy está previsto el inicio de las tareas de desescombro del solar y, además, acometer los preparativos para los trabajos que permitan llevar a cabo la cata y los ensayos necesarios para completar dicho estudio.

Otro aspecto que preocupaba era la posible afección de los edificios colindantes. Sin embargo, la demolición realizada ayer "salió perfecta", incluso en la zona correspondiente a la calle Amalia Alayón, donde los técnicos advertían cierta complejidad.

El único problema detectado fue el de las molestias ocasionadas por el polvo, aunque también esperaban que los efectos fueran mayores.

Desde la noche del domingo, las 24 viviendas y los nueve locales comerciales de los cuatro edificios afectados por el desalojo provisional (por motivos de seguridad y salubridad) estaban vacíos. Medio centenar de personas buscaron su realojo eventual.

El alcalde, José Julián Mena, se mostraba ayer satisfecho por el resultado del trabajo realizado anunciando que "cabe la posibilidad de que podamos reducir el tiempo de 15 días estimado para completar el trabajo".

Mena destacó que la actuación continuará según el plan diseñado con las máximas garantías de seguridad.