Tres mujeres, tres realidades y tres momentos vitales distintos. A partir de este puzle literario armó su última novela Marta Sanz. "Farándula" (Anagrama) toma impulso a partir de un triángulo femenino formado por Valeria Falcón, Ana Urrutia y Natalia de Miguel que tiene un gran trasfondo cultural. "Ana es una vieja diva de la escena que ha caído en el olvido, Valeria es una actriz más o menos reconocida que se mueve entre los cuarenta y cincuenta años y Natalia representa la ambición", cuenta la narradora madrileña en el inicio de una entrevista en la que deja muy claro su posición de partida. "Busqué mostrar el cambio que se había producido entre lo que se entiende como cultura analógica y su tránsito hacia un modelo digital, una evolución en la que se aprecian distintos posicionamientos humanos, morales y culturales", enumera una novelista que ayer mantuvo un encuentro con lectores en la Librería de Mujeres de la capital tinerfeña.

Sanz, que no tiene reparos a la hora de admitir que ella figura en el bando analógico, asegura que en "Farándula" se percibe la sensación de miedo que transmiten las personas que temen perder la posición que ocupan o se sienten vulnerables en un escenario lleno de preguntas que Marta se hace en voz alta.

"Son cuestiones que afectan a la escritora y al personaje que tiene cierta trascendencia social; preguntas que giran en torno a ¿qué es el público?; ¿qué buscamos al leer un libro?; ¿qué tipo de lecturas nos llenan? o ¿si la cultura es algo que se consume o se debe explicar desde otra perspectiva?", asegura una autora que ha adaptado el contenido de "Farándula" a la actual realidad cultural que se vive en España. "Este libro es la novelización, si es que existe ese término, o la ficcionización de un ensayo que escribí hace un par de años que tenía como título "No tan incendiario". "Farándula es mi diagnóstico de cosas que están en el mundo de la cultura que a mí no me gustan, pero al mismo tiempo es una novela de la crisis o de la precariedad, es decir, ese mundo glamuroso de los actores en los que también hay índices de paro... Fernando Fernán Gómez lo describió magníficamente en Viaje a ninguna parte".

La película protagonizada por José Sacristán, Juan Diego y el propio Fernán Gómez no fue la única referencia de la que tiró Sanz para afianzar su idea. La realidad que se refleja sobre los espejos deformantes en el "callejón del gato" de Valle Inclán es otro elemento recurrente para explicar un retrato aciago que Marta Sanz explica a partir de la idea de que "en el mundo de la cultura hay clases sociales y en este libro la deformo desde la sátira", puntualiza antes de analizar su relación con los lectores. "Hay autores a los que les cuesta salir de sus torres de marfil, a mí no... Me encanta fajarme con los lectores; comprobar sobre el terreno que les puedo ofrecer".

"Animales domésticos", libro que Sanz escribió hace 13 años es fruto de uno de esos intercambios de golpes entre un escritor y los lectores. "Estaba participando en un club de lectura que se celebrada en Getafe cuando una mujer se acercó y me dijo que había dejado de leer porque a medida que iba acabando lecturas su familia le parecía una auténtica pandillita de animales domésticos. Aquella lectora me confirmó una intuición que yo tenía sobre la cultura, pero que ella verbalizó bastante bien, o por lo menos mejor de lo que yo lo había hecho nunca: la cultura nos transforma y a veces nos puede dotar de un sentido crítico que nos hace daño", concluye.

Marta

Sanz

escritora / Autora de "Farándula"

Autora:

Marta Sanz.

Título:

"Farándula"

Editorial:

Anagrama.

Páginas: 231.