La Defensora de la Ciudadanía de Candelaria, Elena Peraza, dio cuenta en el último pleno municipal de la memoria de gestión de su oficina en 2015, un año en el que se produjo un descenso del 36% en el número de quejas planteadas, en comparación con 2013. Peraza atribuyó esta reducción a que los vecinos optaron en 2015 por esperar a la celebración de las elecciones municipales antes de dirigirse al consistorio y a que la reestructuración que supuso la formación del nuevo gobierno municipal hizo que "los usuarios prefirieran evitar conflictos y optaran por la mediación".

Esta oficina atendió en 2013 un total de 82 quejas, de las que 13 llegaron desde el Diputado del Común y una desde el Defensor del Pueblo. En 2015, el número de quejas bajó a 52, de las que 44 fueron planteadas directamente en el consistorio, siete se trasladaron desde la oficina del Diputado del Común y de nuevo una desde el Defensor del Pueblo.

De esas 44 quejas, 35 fueron admitidas a trámite y 26 han sido archivadas, "once de ellas con resultado satisfactorio". Otras nueve continúan en tramitación.

Las intermediaciones se han incrementado un 14% en dos años, ya que pasaron de los 64 de 2013 a las 73 del año pasado.

Según Elena Peraza, su oficina atendió el año pasado una media semanal de entre 25 y 30 consultas ciudadanas, e intervino en una media de 22 reuniones a la semana con personal o representantes de la administración municipal.

La Defensora de la Ciudadanía recomendó al consistorio "más agilidad en la tramitación de los expedientes administrativos, procurando cumplir los plazos legales establecidos; una adecuada motivación de las resoluciones administrativas; erradicar el silencio administrativo en la culminación de los procedimientos administrativos; fomentar la difusión de derechos a la ciudadanía, y practicar una labor pedagógica en las relaciones entre la administración y los administrados".