Comisiones Obreras presentará una querella por la vía de urgencia contra el Consejo de Administración del Instituto Tecnológico de Canarias (ITC), al que acusa de haber coaccionado a sus trabajadores con el posible cierre de la empresa cuando había una huelga convocada.

El secretario general de Servicios de CCOO en Canarias, Pedro Moreno, afirmó ayer que se ha producido un atentado contra la libertad sindical y el derecho de huelga, pues el Consejo de Administración del ITC anunció que liquidaría la empresa si los trabajadores no accedían a reducirse el salario, tal como ellos exigían.

A su juicio, el acuerdo adoptado ayer por el Consejo de paralizar el expediente de disolución de la empresa para seguir trabajando en su reestructuración, una vez que los trabajadores han aceptado la reducción salarial, demuestra las coacciones.

Moreno entiende que se trata de "la prueba evidente de que el Consejo pretendía generar angustia y miedo para que la plantilla se plegara a sus exigencias".

El sindicato tiene previsto registrar en los juzgados la querella contra el Consejo de Administración el próximo lunes. CCOO exige también que la propuesta hecha por la dirección a los trabajadores para el futuro de la empresa se formalice ante el Tribunal Laboral Canario, para que tenga fuerza legal, e incluya un plan de viabilidad además de otras cuestiones laborales.

Moreno dijo que los trabajadores no se fían, porque tienen "la experiencia de lo sucedido en los años 2014 y 2015, cuando se rebajaron el salario sin que haya dado resultados".

Por eso, el sindicato demanda que la propuesta se formalice ante la cita que la dirección del ITC y el comité de empresa tienen el 22 de julio en el Tribunal Laboral Canario, para que tenga rango de convenio colectivo y garantías suficientes.

Asimismo, Moreno lamentó que el presidente del Gobierno regional, Fernando Clavijo, se sumase a "la actitud coactiva" adoptada por el consejo de administración del ITC el mismo día que los trabajadores votaban sobre la propuesta laboral.

Ese día, el jefe del Ejecutivo anunció que su Gobierno no estaba dispuesto a sostener empresas públicas que no resultasen útiles a la sociedad, si, además, estaban generando cada año déficit.

Por otra parte, el dirigente sindical criticó que el ITC asegure que no se perderán puestos de trabajo cuando en los últimos años ya se han reducido 60 empleos.

El secretario general de CCOO en las Islas, Carmelo Jorge, destacó que el ITC es "una herramienta estratégica de la sociedad" y que cerrarlo supondría desperdiciar todo el esfuerzo hecho en investigación.

El Consejo de Administración del Instituto Tecnológico de Canarias, reunido ayer de urgencia, ha paralizado el expediente de disolución de la empresa y ha apostado por continuar con la reorganización de la misma.

"Hemos decidido por unanimidad la paralización del expediente y encomendar a la Gerencia que siga trabajando en el plan de reestructuración y reorganización del ITC", anunció el consejero de Economía del Gobierno regional, Pedro Ortega, durante una rueda de prensa tras la reunión.

Ortega aseguró que la empresa pública está encontrando una "plena disposición" de los trabajadores para abordar esta línea de trabajo, que lo que pretende es optimizar los recursos. "El objetivo es que el ITC trabaje más con el sector privado. Hay que reorganizar el trabajo para optimizar aquellas líneas en las que somos más eficientes e intentar recolocar a gente de un lado a otro", dijo el también presidente del Consejo de Administración.

El Instituto, hacia la reorganización

El consejero de Economía expuso que el acuerdo que aprobaron los trabajadores esta semana dura hasta 2018 y que en principio no se prevén despidos, pero matizó que para garantizar todos los puestos de trabajo habrá que reubicar personal y cambiar funciones.

El acuerdo de los años 2014 y 2015 tenía una rebaja salarial del 14%, una disminución que se restituyó el 1 de enero de 2016. Con el acuerdo aprobado ahora, los trabajadores "recuperarán" un 5% del sueldo, por lo que la bajada salarial será del 9% para 2016. De este 9%, un 5% es reducción de jornada -y por tanto de salario- y el 4% restante que corresponde a bajada salarial total.

"Queremos que cuando se hable del ITC se hable de una empresa ágil, moderna, flexible y que responde a las necesidades de Canarias", concluyó Ortega.