Los socialistas canarios andan a la greña. Simplificando mucho podría decirse que la pelea que divide a los socialistas -que algunos están empeñados en presentar como un debate sobre el proyecto gubernamental de Ley del Suelo- enfrenta a los partidarios de mantener las cosas en la dirección regional del partido como están, hasta la celebración del próximo congreso regional, con quienes quieren que la actual ejecutiva, que califican de inoperante, renuncie, lo deje ya y se monte una gestora.

Esa es la iniciativa que están moviendo los dos diputados "corujos" -la conejera Loli Corujo y el grancanario Gabriel Corujo-, además de Gustavo Matos y el grupo de Abreu, con el apoyo de parte de la ejecutiva insular grancanaria, algún espontáneo descolocado -López Aguilar- y la orquestación sinfónica de Sebastián Franquis, hasta ayer muy próximo a Pedro Sánchez y César Luena, que mueve la batuta pero jura estar al margen, como suele. Las cosas se dispararon a raíz de unas declaraciones del secretario general, José Miguel Pérez, en las que explicó que todo el proceso de renovación orgánica ha caducado por el retraso en la celebración de los congresos federal y regional. Pérez dijo que también él mismo estaba caducado, algo que aceleró la reacción de los díscolos, que plantearon la creación una gestora por Ferraz. La iniciativa no prosperó porque el "caducado" Pérez controla los órganos regionales y nunca ha perdido una votación. Se movió entonces la opción de que dimitiera la mitad más uno de los miembros de la ejecutiva, y se cursaron cartas de petición, que nunca sumaron. Ante el fracaso de esa operación, se intentó convencer a la Federal para que nombrase una gestora en Canarias, algo que tampoco ha prosperado, quizá porque en Ferraz andan con el culo a tres manos, pendientes de sus propios problemas. El encargado de gestionar esa petición -el propio Chano Franquis- declaro ayer cínicamente que él también ésta en contra de que haya cambios antes del Congreso regional. Pero pocas horas antes de que eso ocurriera, Gustavo Matos protagonizó un agrio enfrentamiento con Patricia Hernández, vicepresidenta del Gobierno y previsible sucesora de Pérez en la secretaria general, a cuenta de la Ley del Suelo, ley que los partidarios de crear una gestora han convertido en su principal baza política contra la ejecutiva y el PSOE en el Gobierno. Matos, que presume de sus relaciones con grupos empresariales y del aval de Jerónimo Saavedra, ha publicitado el incidente con Patricia, a la que ya se enfrentó con escaso éxito en las primarias presidenciales y con la que quiere volver a medirse en las primarias por la Secretaría General.

Se trata de un conflicto enrevesado, detrás del que subyace también la mayor debilidad de Patricia Hernández, cuya gestión en materia social -y algunos gestos erróneos- comienzan a ser cuestionados por sus principales valedores, los alcaldes. A eso se suma el ambiente de confusión creado por la crisis de liderazgo del socialismo español, que se intenta empezar a resolver con la próxima sustitución de Pedro Sánchez por Susana Díaz. Esa pelea también tendrá -sin duda- su repercusión en las Islas. Especialmente para quienes -Loli Corujo, Chano Franquis, Ángel Víctor Torres- apostaron más decididamente por Pedro Sánchez. Algunos de ellos -Loli Corujo, que acudió a rendir pleitesía a Susana Díaz a Adeje, o el propio Franquis- han intentado recolocarse en los últimos días, con poco éxito, según parece. La batalla por Ferraz ya está abierta, podría decirse que incluso sentenciada, y lo que después ocurra en Canarias va a ser una continuación de esa misma pelea. Pero el retraso en resolver los problemas partidarios del PSOE alimenta tensiones en el Gobierno. Con la televisión, con la Ley del Suelo, con Asuntos Sociales...