La concejala de Fiestas, Gladis de León, ha adoptado una decisión salomónica después de la polémica abierta tras la reunión que celebró con las murgas hace dos semanas, cuando se planteó la posibilidad de incrementar el número de finalistas de las siete de 2016 a ocho -como antes- para 2017. Esa hipótesis casi se puso sobre la mesa como "moneda" de cambio para acceder a que continúe participando la formación ganadora del Norte. Y hasta el representante de Trabas llegó a defender una final con un tema por grupo, algo que no fue rechazado por una amplia mayoría, si bien las "grandes" son reticentes a esa fórmula porque considera que se sacrifica la esencia de la murga: la letra.

Desde la celebración de la reunión con las murgas, la concejala ha estudiado los pros y contras y se ha decantado por mantener el formato de concurso de la pasada edición. O sea: la final será con las siete mejores valoradas por el jurado, cada participante interpretará dos canciones, al margen de presentación, pasacalle y despedida y se mantendrá la invitación para que concurse la ganadora del Norte, aunque la plaza le corresponda a Trapaseros y ello suponga que, tras su trayectoria, pueda pasar a final y reste opciones a otra de Santa Cruz.

A la hora de tomar esta decisión la organización ha valorado la calidad del espectáculo. Por ello, se hará realidad el viejo anhelo de los murgueros de celebrar la gran final un sábado, y se adelantará la hora de inicio a las 20:00 horas para facilitar la cobertura a los medios de comunicación.

La admisión de la murga del Norte o una final con una canción ha dejado en un segundo plano la propuesta de las murgas, aceptada, que eleva de 35 a 40 el mínimo de componentes, lo que podría pasar factura a las murgas de media tabla hacia abajo. Gladis de León zanja así la polémica. Ahora, a esperar que se abra el plazo de inscripción para todos los concursos en septiembre, según se prevé.

Besay Pérez, fichaje estrella de Zeta-Zetas

Besay Pérez, quien pese a su corta edad (24 años) es uno de los más destacados solistas del Carnaval, -y del folclore y la lírica en general-, protagoniza uno de los fichajes estrellas para 2017.

Desde hace quince años desembarcó en la lírica. Fue en 2002 cuando se incorporó a las rondallas, de la mano de sus abuelos, en la Peña del Lunes desde 2002, hasta que en 2008 hizo un alto con San Gerardo y, desde 2009, en El Cabo, donde es referencia. Desde el próximo septiembre, Besay hará doblete dentro del Carnaval, seguirá como componente y solista de la rondalla El Cabo y sorprenderá como... ¡componente de la murga adulta Zeta-Zetas!

Besay Pérez, jurado de murgas adultas en 2016, no se ha podido resistir a la invitación de Javier Lemus, y colaborará en la presentación de la murga y en el equipo de dirección musical.

Pérez cuenta con dos primeros premios de solista (2012-2014) y tres terceros (2011-2015-2016).

Junto a Besay Pérez, Zeta Zeta recupera de cara a 2017 a algunos de sus fundadores, caso de Javier Suárez Plata, Anisu y Alberto Bonilla, al no salir Rebotados; y también a Julio Alfonso Plasencia, que "regresa" a casa, senda que inició en 2016 Cristian Mapesi, otro baluarte de Rebotados.