Cerca de medio millón de euros del remanente de la Consejería de Educación del Gobierno canario para becas universitarias se destinará este año, por primera vez, a ampliar su número de beneficiarios, de manera que 468 alumnos que inicialmente quedaron fuera recibirán la ayuda para matrículas.

La consejera de Educación y Universidades del Gobierno canario, Soledad Monzón, informó ayer de esta resolución extraordinaria, que ya se ha publicado en el Boletín Oficial de Canarias, en una rueda de prensa en la que explicó que para proceder a esta ampliación se han elevado los umbrales para la renta establecidos inicialmente en la convocatoria. Se trata de una medida que la propia convocatoria recoge en caso de que existan fondos suficientes para atender las solicitudes, señaló Monzón, quien indicó que es la primera vez que se aplica, pues en años anteriores se destinaba a otros fines.

A 112 de esos 468 alumnos se les rechazó inicialmente su solicitud porque eran personas con indicadores de renta que no superaban los umbrales establecidos para recibir una beca, pero al sumar el indicador de patrimonio, sí los rebasaron. Al estudiar su situación se observó que se trataba de alumnos con rentas bajas que habían recibido alguna subvención o poseían alguna finca rústica en herencia. El resto de alumnos pueden disfrutar ahora de la beca al haberse elevado el umbral de renta permitido hasta un 17,9% sobre el inicial, detalló la consejera. A estos nuevos beneficiarios se les devolverá el importe que hayan pagado por sus matrículas en el curso 2015/2016.

La consejera especificó que este año se registraron 15.800 solicitudes a principios de curso, cifra inferior a la del año anterior. Asimismo, señaló que 5.220, más los 468 de la ampliación, han sido becados por la comunidad autónoma y 5.637 por el Ministerio de Educación. Un total de 4.600 peticiones fueron denegadas por motivos académicos.

La consejera destacó de las nuevas políticas aplicadas por su departamento, además de la ampliación de becas, el haber dado prioridad durante este curso a las peticiones por motivo de cambio de residencia, al entender que en su mayor parte benefician a los alumnos de las islas no capitalinas. Con esa medida se pudo resolver la mayoría de las solicitudes de personas afectadas por la doble insularidad en el primer listado de becas del año, publicado de forma provisional el 8 de febrero y ya de manera definitiva el 17 de marzo. Además, también se adelantó la resolución final de becas en un mes con respecto al curso anterior, desde el 14 de julio al 14 de junio, paliando en parte el retraso en el cobro que señalan los becados con frecuencia como el primer aspecto mejorable del sistema. Monzón sostuvo que la política de adelanto de resoluciones se acentuará aún más el próximo curso 2016-2017 gracias a la mejora en el sistema de informatización.