El Banco Popular registró un beneficio neto de 94 millones de euros en el primer semestre del año, lo que supone un 50 % menos que en el mismo periodo de 2015, después de dedicar todas las ganancias del segundo trimestre a provisiones.

Así lo ha explicado hoy la entidad en una nota remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en la que también da cuenta de la sustitución de su consejero delegado, Francisco Gómez, por Pedro Larena.

La venta de inmuebles continúa a buen ritmo, hasta un total acumulado de 1.075 millones de euros, después de elevarse el 50 %, en tanto que el crédito rentable crece un 1,6 %, apoyado en el negocio de pymes y autónomos.