Están hartos, pero miden sus palabras y prefieren no identificarse por miedo a que haya consecuencias. Vecinos de la calle Ponce de León, en el barrio de Ofra, denuncian lo que ellos definen como "el solar de la vergüenza", una propiedad privada en la que murieron dos personas hace casi dos años y que ahora utilizan otras para pincharse.

Abandonado desde hace años, el terreno en cuestión está al final de la citada vía, pero su acceso principal da al número 128 de la Carretera General de El Rosario.

Desde el desgraciado suceso de agosto de 2014, en el que fallecieron calcinados un hombre y una mujer embarazada, el pequeño muro de bloques de canto que dificultaba el acceso al interior del solar, que cuenta también con varias habitaciones, tiene un enorme hueco que hace de "coladero".

Así accedieron los bomberos que acudieron aquella madrugada del 16 agosto a sofocar el fuego.

Los dos fallecidos, según explicó en aquel momento la Policía Local, fueron hallados en uno de los cuartos del inmueble, sobre unos colchones que habían ardido. Antes de que ocurriera el suceso, los vecinos de la zona ya habían advertido de lo que sucedía en el lugar.

Tras aquel incidente, relatan los residentes en la calle, se pusieron unos bloques sueltos que no impiden el acceso al interior del solar. Es decir, que no se dio una solución al problema.

"La Policía viene cada dos por tres y se lleva a varias personas", asegura otro de los residentes en la calle. Por eso, los vecinos están "mosqueados". "Ya no sabemos qué hacer para que nos hagan caso", aseguran.

Consideran los afectados que el ayuntamiento debería instar a los propietarios a limpiar el terreno y a vallarlo, pues se ha convertido en un foco de inseguridad.

Según indican los vecinos, tras el abandono de la propiedad puede estar su afectación por un plan parcial. Al parecer, la idea es que ese terreno acabe siendo utilizado para darle salida a la calle Ponce de León, por lo que no se podría fabricar en él.

"Si es así, que el consistorio actúe mientras no se haga otra cosa", reclaman los ciudadanos del entorno. "Lo que no podemos es seguir viviendo aquí de esta manera", añaden.

Denuncia vecinal por la acumulación de basuras

Si bien en el caso de la propiedad de la calle Ponce de León la problemática tiene que ver, principalmente, con la seguridad, en el caso del terreno de la calle Pedro de Valdivia, en Ofra, son las basuras las que han llevado a los vecinos a denunciar la situación. El solar ubicado en el número 23, cuya trasera da a un paseo peatonal, se ha convertido en un vertedero. Restos de vehículos de todo tipo, enseres, escombros y, desde hace un tiempo, bolsas de basura con restos orgánicos han hecho que durante los últimos días de calor los residentes en los alrededores hayan tenido que sufrir los malos olores. Aunque nadie quiere señalar a un culpable, sospechan los denunciantes que podrían ser vecinos que consideran que el contenedor de la basura "está muy lejos" para depositarla.