En plenas vacaciones lo llaman para darle una excelente noticia: "¡Ring, ring!" (onomatopeya del teléfono) "¡Oye, chacho, que te han dado el premio al mejor actor en el Festival de Cine de Tarazona por Como yo te amo, de Fernando García-Ruiz! (Silencio. Uno se imagina las habituales muecas de Aarón Gómez, lógicamente irreproducibles en papel).

"¡Dos de dos y flipando!", comenta sobre una cinta con la que ya logró este premio en Torrelavega y que esta vez, además, se hizo con los premios al mejor montaje y del público en un festival que también preselecciona para los Goya, "aunque no logramos el de mejor corto" comenta el chicharrero aún medio en el aire, recién llegado a la T4 del aeropuerto de Barajas, al referirse a una gala que contó con figuras de la talla de Michelle Jenner, Fele Martínez o Verónica Forqué. "Ahora toca Maipú, en Argentina, a ver qué tal va".

En "Como yo te amo", Aarón Gómez hizo el papel de golfo madrileño, "con un acento que al final se quedó en una mezcla de madrileño y canario" -que espera sepan perdonarle sus fieles seguidores- que se enamora de la policía que lo detiene; ella va ascendiendo en el escalafón y él en su carrera delictiva para así seguir coincidiendo con ella", encarnado por Silvia Alonso, arropados por un ambiente de explosiones, persecuciones, vías bloqueadas...

El personaje "es expresivo, con un trabajo interno más potente", comenta de una comedia liviana que aborda con "un registro un poco diferente", si bien considera que "detrás de un cómico siempre late un buen drama; bajo la comedia subyacen otro tipo de expresiones que son muy agradecidas, me encantan. Tengo mi lado melancólico y dramático y, además, está muy latente".

El hecho de que lo eligieran para este rol lo relaciona con "la casualidad", una intrahistoria con tiene algo de corto: "La productora de la película, The Kitchen Films, se encontraba rodando en Tenerife y sonó mi nombre porque el actor que estaban barajando no podía interpretarlo. Ellos vieron unos vídeos míos y apostaron por mí".

A partir de ahora, "lo que venga son goles en el descuento. Los premios son muy bonitos", subraya Aarón Gómez de unas sensaciones que lo transportan: "De repente siento que tengo permiso para soñar; floto, pero no vuelo demasiado alto".