El Defensor del Paciente ha pedido responsabilidades al Hospital Universitario Ntra. Sra. de Candelaria (HUNSC) por el daño causado a un anciano que se fracturó los dos brazos al sufrir una caída en este centro hospitalario, situado en la isla de Tenerife.

Los hechos se produjeron el pasado 12 de agosto, cuando esta persona acudió al Hospital de La Candelaria al tener consulta y sufrió una fuerte caída en la que se rompió ambos brazos al deslizarse su andador al entrar en un ascensor.

Según relata la hija del afectado en una nota remitida por el Defensor del Paciente, su padre ingresó ese mismo día en el Hospital para ser operado, pero por sus complicaciones médicas no se pudo proceder a la intervención y se le quiso dar el alta.

Cuenta, además, que ella es la única persona que se encarga de cuidar a su padre y a su madre, enferma de Alzheimer, y que está a la espera de una operación de columna que ha tenido que aplazar en tres ocasiones al no poder dejarlos.

Esta familia vive en Abades, en el municipio de Arico, en una casa que, según la afectada, no está adaptada para cuidar a su padre en su estado actual, ya que no dispone ni de medios, ni de ayuda alguna.

Para el Defensor del Paciente, "se trata de un hecho inadmisible, ya que parece que la prevención de riesgos en el HUNSC brilla por su ausencia, causando un daño importante añadido a la patología que el paciente ya padece y un importante perjuicio para sus familiares".

Afirma que la causa que pudo provocar la caída es que el suelo estaba recién fregado. No obstante, considera que es un accidente "evitable" del que debe responsabilizarse el Hospital porque no había ningún letrero que avisase de que el suelo estuviera mojado o que dejasen de funcionar los ascensores hasta estar secos.