Camarón que se duerme... se lo lleva la corriente. Este popular refrán nos advierte sobre la necesidad de mantenernos alerta, ser astutos y aprovechar las oportunidades. Pues bien vale este recuerdo para citar lugares donde degustar unos buenos camarones, grato aperitivo en compañía de una cerveza fresca que están para chuparse los dedos y las cabezas. En Santa Cruz conozco dos referencias de plena garantía que, además, brindan otros excepcionales géneros de mar. Se trata del Cafetería Bahía, enfrente del Club Militar Paso Alto, en la avenida de Anaga, y la pescadería Nicomedes, en el mercado Nuestra Señora de África.

Los camarones ofrecen varias ventajas nutricionales, como es el caso de la ingesta de proteínas, vitaminas y minerales, si bien también tiene algunas desventajas que podrían afectar tu salud cardiovascular, como es su alto nivel en sodio y colesterol.

El biólogo José Antonio González refiere que el camarón o ca marón narval (Plesionika narval) es el que cuenta con mayor tradición culinaria en Canarias, consumiéndose generalmente cocido como entrante. Muy apreciado, sobre todo en Tenerife y las islas occidentales, se captura habitualmente con nasas de fondo, entre 100 y 200 metros. Presenta un rostro largo con unos 40 dientecillos muy apretados. De color blanquecino transparente con rayas rojas brillantes bien definidas y, en el dorso, con cuatro líneas amarillo dorado, situadas entre las rojas.

Sin embargo, los estudios biológicos y pesqueros de los últimos 20 años han dado paso en Canarias al camarón soldado (Plesionika edwardsii), que vive a mayor profundidad y en aguas más frescas. Su rostro es similar al del camarón narval, aunque presenta 4 dientes dorsales por encima de los ojos, seguidos de dos o tres espinitas móviles. Por su tamaño puede consumirse tanto hervido como a la plancha con sal e incluso en ceviche y ensaladas.