Después de los primeros e intensos entrenamientos de pretemporada que ha venido llevando a cabo el Iberostar Tenerife, en el día de ayer la plantilla disfrutó de una jornada -la última de la semana- de preparación ciertamente más distendida.
Por un día, el conjunto canarista abandonó la clásica preparación sobre la cancha y gimnasio del Santiago Martín y se trasladó hasta la capital tinerfeña con el fin de llevar a cabo una jornada de actividad marítima.
En instalaciones y con las prestaciones del Centro Insular de Deportes Marítimos de Tenerife (Cidemat), la plantilla aurinegra tomó parte de actividades que normalmente no suelen ser habituales en la preparación de un equipo de élite de baloncesto.
Así, la piragua y los remos fueron los protagonistas en una práctica supervisada por los propios monitores del Cidemat y el preparador físico de la escuadra canarista, Xisco Sanz.
En opinión de Sanz, esta actividad "supone una manera de salir de la rutina de la cancha después de una semana con mucho volumen de trabajo físico y hacer grupo practicando paddle surf y piragüismo", aseguró en declaraciones a la web oficial del club, www.cbcanarias.net.
La iniciativa permitió además trabajar aspectos como la coordinación y la resistencia en un espacio privilegiado, el balcón marítimo de la capital tinerfeña. Will Hanley, pívot canarista, habló también de una "actividad divertida y diferente, fuera del baloncesto" y se refirió a las primeras sensaciones de pretemporada. "Todo va muy bien, ya teníamos muchas ganas de empezar", dijo. "Ha sido una dura semana de trabajo, con dobles sesiones, así que está bien acabar con una actividad así, haciendo grupo", manifestó el interior americano.
El primer equipo aurinegro descansará a lo largo del día de hoy y reanudará el trabajo mañana en doble turno con otro intenso plan semanal por delante, que culminará con el primer test de pretemporada, el sábado día 3 de septiembre, ante el Herbalife Gran Canaria, en un amistoso a celebrarse en el Pabellón de Las Torres de Adeje (20:30 horas).